Los dos sindicatos mayoritarios de España instaron hoy en Madrid al gobierno conservador de Mariano Rajoy a corregir su impugnada reforma laboral, tras el éxito de la huelga general de este jueves.

Por enésima vez, los líderes de la Unión General de Trabajadores (UGT), Cándido Méndez, y Comisiones Obreras (CC.OO.), Ignacio Fernández Toxo, exhortaron a Rajoy a abrir un proceso de diálogo para modificar una norma que abarata y facilita el despido, reporta Prensa Latina.

Entrevistados por Radio Nacional de España y por la Cadena Ser, ambos dirigentes advirtieron que el 1 de mayo, Día Internacional de los Trabajadores, podría haber un nuevo anuncio de las centrales obreras si el gobierno no se sienta a negociar antes de esa fecha.

Aunque no la descartaron del todo, los secretarios generales de CC.OO. y de la UGT juzgaron prematuro hablar en estos momentos sobre una nueva convocatoria de huelga, tras la que paralizó la víspera este país.

En esa línea, confiaron en que el presidente del Ejecutivo y líder del derechista Partido Popular (PP) tome nota del seguimiento masivo del paro general de ayer y de las multitudinarias manifestaciones que lo acompañaron en más de un centenar de ciudades españolas.

A juicio de Méndez, la administración del PP se encuentra en una encrucijada, y debería mover ficha para evitar la prolongación del conflicto social y dejar de comportarse como si fuera un gobierno tecnócrata, al estilo del griego o el italiano, enfatizó.

Ayer se canalizó con éxito el sentimiento existente en España, donde sus políticas de recortes sociales y laborales no tienen el respaldo de la ciudadanía, insistió.

Su homólogo de CC.OO. señaló que si el Palacio de la Moncloa (sede del poder central) no hace un gesto antes del 1 de mayo, los sindicatos madurarán decisiones que ya tienen perfiladas, entre ellas una intensa campaña de información en los centros de trabajo.

Al cierre de la manifestación de la víspera, como colofón de la huelga general, Fernández Toxo y Méndez avisaron sobre una escalada de la confrontación social si el PP persevera en su dinámica suicida de ajustes.