El presidente sirio, Bashar al-Assad, reiteró este viernes la
disposición de su gobierno de no escatimar esfuerzos por lograr que
la misión del enviado especial de la ONU, Kofi Annan, tenga éxito en
restaurar la seguridad y estabilidad en este país.
No obstante, advirtió que las otras partes deberán asumir sus
compromisos para detener la violencia armada y terrorista contra
Siria, para que así la propuesta de arreglo político de Annan pueda
avanzar, reporta Prensa Latina.
Al-Assad recalcó la voluntad de Damasco que responde a la
estrategia de su administración de poner fin a la crisis, en una
carta de agradecimiento a los dignatarios del Grupo Brics que
integran los llamados países emergentes Brasil, Rusia, India, China
y Sudáfrica, quienes se reunieron en Nueva Delhi la víspera para
celebrar su cuarta cumbre.
En la misiva, divulgada hoy aquí, el presidente sirio expresa su
esperanza de que Annan aborde los factores de la crisis de forma
integral, en particular los regionales e internacionales.
A su juicio, para que su misión puede tener éxito, debe
concentrar sus esfuerzos en detener las fuentes que apoyan el
terrorismo contra Siria, especialmente los estados cuyos gobernantes
hicieron público que financian y arman a los grupos terroristas en
Siria, e incluso llamaron a pertrecharlos más.
Al-Assad aclaró que a cambio de un apoyo formal y total de Siria
a su plan, es necesario que el enviado especial de la ONU obtenga
claros compromisos de las otras partes para detener los actos
terroristas, desarmar a los grupos armados y poner fin a sus
acciones violentas, secuestros, matanzas de inocentes civiles y
sabotajes contra la infraestructura tanto pública como privada.
En ese sentido, enfatizó la necesidad de convencer a los Estados
que apoyan a los grupos terroristas con dinero y pertrechos bélicos
a detener de inmediato ese respaldo, incluido el de países vecinos
que acogen a esas bandas y facilitan las operaciones terroristas
contra Siria.
Al-Assad afirmó que se le propuso a Annan celebrar consultas
integrales sobre los detalles relacionados con la aplicación de su
plan acorde con el común entendimiento de que los grupos armados no
aprovechen y exploten el ambiente que cree el gobierno para llevar
adelante los compromisos como hicieron cuando Siria dio total apoyo
al Plan Árabe de Trabajo.
Sobre ese punto, recordó que la Liga Árabe frustró esos
compromisos luego que su misión observadora comprobó e informó sobre
la existencia de grupos armados terroristas responsables por la
violencia y matanzas en Siria.
El dignatario reafirmó también la voluntad de desarrollar un
diálogo nacional pronto con la participación de todos los grupos que
están trabajando por mejorar la seguridad y estabilidad en el país,
y expresó su esperanza de que los países del Brics realicen
esfuerzos para que se pueda lograr ese objetivo.
Siria acoge cualquier esfuerzo y gestión por los países del grupo
en este sentido, subrayó al-Assad.
En su declaración, el mandatario agradeció la postura asumida por
el Grupo Brics de rechazar todo tipo de interferencia en los asuntos
internos de Siria.
En su cumbre de Nueva Delhi los dirigentes del bloque recalcaron
el principio de respetar la soberanía y la independencia de los
Estados y llamaron a una acción internacional multilateral como
alternativa a las políticas de hegemonía e intromisión.
Los presidentes Dilma Rousseff (Brasil), Dimitri Medvedev
(Rusia), Hu Jintao (China) y Jacob Zuma (Suráfrica), y el primer
ministro indio, Manmohan Singh, urgieron a una mayor cooperación
para construir un mundo multipolar sobre los valores de relaciones
democráticas entre los Estados, subrayó el mandatario sirio en su
declaración enviada a cada uno de esos países.
Al-Assad aseveró en su misiva que para responder a las
aspiraciones del pueblo sirio decretó un paquete de leyes coronadas
por la emisión de una nueva Constitución que contempla las
libertades y el pluralismo político sobre principios del trabajo
democrático.
Sin embargo, pese a ese esfuerzo -señaló- han exacerbado la
crisis en Siria con una intensa y distorsionadora campaña mediática
y la continuación de los asesinatos y las operaciones terroristas
respaldas por fuerzas que suministran armas y apoyo financiero a los
extremistas.
Esas mismas fuerzas -concluyó- tratan de utilizar los foros
internacionales para lograr la aprobación de decisiones
inconsistentes con la Carta de la ONU y responsabilizan al gobierno
sirio por lo que acontece en el país.