Con creciente peso en la economía y la diplomacia mundial, los países miembros del Brics recalcaron este jueves en Nueva Delhi que el diálogo es la única manera de resolver la crisis en Siria y la cuestión iraní.

Una solución duradera en Siria e Irán solo puede lograrse mediante el diálogo, sostuvieron los presidentes Dilma Rousseff, Brasil; Dimitri Medvedev, Rusia; Hu Jintao, China; Jacob Zuma, Sudáfrica, y el primer ministro indio, Manmohan Singh, en un documento que sintetizó las labores de la IV Cumbre del grupo.

Estamos preocupados por la situación que está surgiendo en torno a la cuestión nuclear de Irán, dijeron los líderes del Brics en la Declaración de Delhi.

No se puede permitir que la situación en Irán degenere en un conflicto cuyas desastrosas consecuencias no están en el interés de nadie, advirtió el quinteto en franca alusión a los presumibles planes de Estados Unidos de atacar instalaciones de la nación persa a las que atribuyen capacidad nuclear militar.

En defensa del derecho de Teherán al uso pacífico de la energía nuclear, abogaron por una solución política y diplomática y por el diálogo entre las partes, en particular el Organismo Internacional de Energía Atómica e Irán, y de conformidad con las disposiciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

Los Brics también pudieron conciliar una posición común respeto a Siria pese a que recientemente China y Rusia vetaron en el Consejo de Seguridad una resolución patrocinada por Estados Unidos y la Liga Árabe por entender que implicaba respaldar un cambio de régimen en ese país, mientras la India se pronunció a favor.

La Declaración de Delhi expresó una profunda preocupación por la situación en Siria y llamó a un cese inmediato de toda violencia y de las violaciones de los derechos humanos en ese país.

Los intereses globales estarían mejor servidos manejando la crisis por medios pacíficos que estimulen amplios diálogos nacionales representativos de las legítimas aspiraciones de todos los sectores de la sociedad siria y que respeten la independencia, integridad territorial y soberanía de Siria, proclamó.

Según analistas aquí, la posición de los Brics sobre Irán y Siria será motivo de inquietud para Occidente, que mira con recelo las simpatías de la asociación por un orden mundial alternativo.

De hecho, esta cuarta cumbre reveló una cierta evolución del grupo, pues si hasta hace un tiempo estaba centrado solo en temas de índole económica, cada vez más intenta imprimirle una mayor coherencia política a su accionar.