La reparación capital de unos 40 kilómetros de la principal vía
férrea del país, prevista para este año, marcha según el cronograma
de trabajo establecido, sin existir atrasos por recursos o falta de
atención al hombre, aseguró a Granma el ingeniero Bárbaro
Martínez Fortín, especialista principal de la Empresa Nacional de
Vías y Obras Constructivas del Ferrocarril (VOC).
Las acciones estarán concentradas —precisó— en los tramos de La
Habana-Aguacate (13 km), Santa Clara (6 km) y Camagüey-Las Tunas (22
km). El primer trayecto de estos constituye el más adelantado en
materia de rehabilitación y pronto comenzarán las labores de rescate
en los dos restantes.
"Las principales labores que realizamos hoy en kilómetros del
tramo de La Habana-Aguacate se refieren al riego de piedras en la
línea, y a trabajos como el desguarnecido (máquina que saca la
piedra de la vía, la limpia y vuelve a regarla en ella), que implica
el cambio individual de las traviesas y los elementos de fijación en
mal estado.
"Después la máquina reguladora lleva la línea a su nivel, y se
procede al cambio de carril, tarea a cargo de la Empresa de Soldar
Carriles, y con la cual se dejará terminado el tramo", explicó.
Todo ello irá restableciendo las velocidades diseñadas para la
Línea central: 70 km/h para trenes de carga, 100 km/h para viajeros
por locomotora y 120 km/h para los coche-motores. La reparación de
esta importante ruta ferroviaria, con una extensión de 835
kilómetros que van desde La Habana hasta Santiago de Cuba, está
proyectada hasta el año 2013.
Cuando termine este programa —apuntó Martínez Fortín— se
comenzará la reparación capital de las vías principales-secundarias
que constituyen posibles desvíos de la Línea central, o son
importantes desde el punto de vista económico y del tráfico que
circulará por ellas.