El saldo de víctimas de los dos atentados terroristas con carros
bombas perpetrados este sábado en esta capital asciende a 24 muertos
y 140 heridos, además de provocar enormes daños materiales, informó
el Ministerio del Interior.
Una declaración de esa dependencia gubernamental advierte que la
cifra de muertos podría aumentar debido a que varios de los heridos
están en estado grave.
Los ataques suicidas estuvieron dirigidos contra una dependencia
de la seguridad de la Fuerza Aérea ubicada en el barrio cristiano de
al-Qassa, próximo a la Plaza Tahrir, y el segundo contra el
Departamento de la Policía Judicial que está en la circunvalación de
al-Yamarek cerca de la Plaza Omeya, entre los distritos de Mezzeh y
Kafr Susser.
Las explosiones ocurrieron casi al unísono, con tan solo muy
escasos minutos de diferencia, igual modo de ejecución de los
cometidos en esta misma urbe el viernes 23 de diciembre de 2011 y en
la ciudad de Aleppo el 10 de febrero pasado.
El atentado terrorista del 6 de enero en Damasco lo cometió un
suicida cargado con explosivos.
Por el modo de planificación, ejecución y el tipo de explosivo
empleado, las autoridades sirias denunciaron que fueron cometidos
por la red terrorista al-Qaeda.
En el doble ataque terrorista del 23 de diciembre, también con
coches bombas dirigidos contra dependencias de la seguridad en la
capitalina área de Kafr Susser, perecieron 44 personas y 166
resultaron heridas, entre militares y civiles, además de cuantiosas
pérdidas materiales.
La explosión del suicida el 6 de enero en una concurrida zona
entre una escuela de segunda enseñanza y un departamento policial en
el barrio de al-Midan causó 26 muertos y 63 heridos, advirtió Prensa
Latina.
Los dos atentados con coches bombas en Aleppo del 10 de febrero
contra una dependencia de la seguridad militar y una unidad de las
fuerzas del orden en el área de al-Arqoub dejaron saldo de 28
muertos y 235 heridos, entre uniformados y civiles, incluidos niños.