Autoridades de Mauritania capturaron a Abdulah Al-Senoussi, exjefe de inteligencia del ya fallecido líder libio Muamar El Gadafi que era buscado por la INTERPOL, mientras el gobierno de Trípoli solicitó su inmediata extradición.

Un comunicado del gobierno mauritano señaló que Al-Senoussi fue detenido el viernes en la noche en el aeropuerto internacional de Nouakchott, a donde llegó en un vuelo procedente de la ciudad de Casablanca, Marruecos, con un pasaporte falso de Mali.

Al-Senoussi, junto con el El-Gadafi y el hijo de éste, Saif Al-Islam, fueron los primeros funcionarios del derrocado gobierno contra los que la Corte Penal Internacional (CPI) giró en junio pasado órdenes de arresto por supuestos crímenes contra la humanidad.

La CPI basó sus imputaciones en presiones de potencias occidentales que intervinieron militarmente en Libia en apoyo de quienes se sublevaron en 2011 contra el gobierno de la Jamahiriya.

El auto acusatorio del referido tribunal tilda a Al-Senoussi de un perpetrador indirecto de crímenes contra la humanidad por asesinatos y enjuiciamientos (de opositores), basados en consideraciones políticas supuestamente cometidos en la ciudad de Benghazi, cuna del alzamiento.

El exjefe de inteligencia y cuñado de El Gadafi también fue uno de los seis libios acusados, juzgados y condenados en ausencia a cadena perpetua en Francia por su alegada implicación en un atentado contra un avión de pasajeros en Níger, en 1988, en el que murieron 170 personas.

Por lo mismo, París solicitó hace años su extradición, además del pedido de detención de la CPI y de la cacería que lanzó el autoproclamado gobierno libio del Consejo Nacional de Transción (CNT).

Este mismo sábado, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores en Trípoli, Saad Al-Shilmani, confirmó la captura y dijo que ya están en marcha los llamados de las autoridades libias para solicitar su extradición.

A su vez, el vocero del gobierno libio, Nasser Al-Manee, precisó que la detención del exfuncionarios de 62 años se produjo esta mañana y no el viernes en la noche, como indicaron autoridades mauritanas.