Raquel Marrero Yanes y Yohan Rodríguez Blanco

La placa 280 Aniversario de la Universidad de La Habana (UH) fue entregada ayer al Museo Fragua Martiana, en conmemoración por el aniversario 60 de su fundación, el 28 de enero de 1952, y como reconocimiento a su sostenida y ardua labor en la formación de valores en la nación cubana.

En el acto, presidido por el miembro del Comité Central del Partido, doctor Armando Hart Dávalos, director de la Oficina del Programa Martiano, la vicerrectora de la UH, Rita María Rial Blanco, señaló que la Fragua desde su fundación está reconocida como una de las más importantes instituciones martianas, como un centro de referencia para la investigación, estudio y divulgación de la vida, obra y pensamiento del Apóstol, y como espacio de excelencia en el trabajo de extensión universitaria.

Asimismo, recordó que su edificación fue al pie de las ruinas de las canteras de San Lázaro, lugar donde cumpliera el joven Martí su condena de trabajo forzado durante el presidio.

Al recibir el galardón de manos de Gustavo Cobreiro Suárez, rector de la Casa de Altos Estudios, David Hernández Duany, director del Museo, agradeció en nombre del colectivo de trabajadores la distinción, a la vez que resaltó la labor desempeñada por quienes a lo largo de estos años han apoyado y orientado el quehacer de la Fragua.

Como parte de la conmemoración, se entregó además el reconocimiento Corona de Laurel —instituido por el centro—, a quienes se han consagrado a la formación y educación de las nuevas generaciones. Entre ellos, el doctor Armando Hart Dávalos, Margarita López del Amo, Carlos Manuel Marchante Castellanos y Verona Rodríguez Camacho, así como a la escuela primaria Pepito Mendoza y a la Dirección Municipal de Educación, ambas del municipio capitalino de Centro Habana.