TÚNEZ, 24 de febrero.— La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, afirmó hoy que en la reunión de los "Amigos de Siria" acordaron aumentar la presión para que abandone el poder el presidente sirio Bashar al Assad, a quien amenazó con pagar "un alto precio", informa EFE.

Clinton dijo que volverá "una y otra vez" al Consejo de Seguridad, y subrayó que hay que cambiar la posición de Rusia y China.

Asimismo, el presidente de EE.UU., Barack Obama, pidió hoy continuar con la presión sobre Damasco y usar "todas las herramientas disponibles" para detener la "masacre de inocentes" en ese país.

Representantes de unos 50 países y organizaciones internacionales se reunieron en Túnez para supuestamente hallar soluciones al conflicto sirio, sin la presencia del Gobierno de Damasco —que no fue invitado—, y con la participación del ilegítimo Consejo Nacional Sirio (CNS), que exigió a los presentes ayuda militar.

Los llamados "Amigos de Siria", término que trae a la memoria los pasos emprendidos por Estados Unidos y la Unión Europea (UE) contra Libia, realmente buscan vías para presionar al presidente Al Assad y brindar respaldo total a la oposición armada, refiere PL.