El grupo radical islámico Boko Haram asaltó una prisión en el
central estado nigeriano de Kogi, violenta acción que dejó hoy como
saldo un guardia de seguridad muerto y propició la liberación de
numerosos detenidos.
Según fuentes cercanas a la administración del penal Koton Karfe,
los miembros de la secta irrumpieron en la instalación con dinamita
y armas de fuego, tras tirotear a uno de los vigilantes, cuya
identidad no fue revelada, difundió el diario Nigerian Tribune.
Testigos presenciales de esos hechos dijeron que algunos
integrantes del cuerpo de seguridad de la cárcel también resultaron
heridos tras la fuerte y sorpresiva embestida de Boko Haram.
El miembro de la Casa de Gobierno en el estado de Kogi, Akawa
Salihu, confirmó el ataque contra el penal la víspera, que duró
alrededor de media hora.
Agentes de seguridad detallaron, por otro lado, que los reos
liberados, al parecer cercanos a la agrupación fundamentalista
islámica, esperaban juicio en esa penitenciaria.
Ataques de Boko Haram contra sedes de iglesias cristianas e
instalaciones gubernamentales en Nigeria provocaron desde 2009 hasta
la fecha la muerte de más de 900 personas y cientos de heridos,
según organismos humanitarios.
Boko Haram, que significa la educación occidental es pecado,
proclama su lucha por la implantación de la ley islámica sharia, en
los 36 estados de este país africano, el más poblado de África con
más de 160 millones de habitantes, reportó Prensa Latina.