El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, viaja hoy
a Viena para asistir a sendos encuentros sobre el comercio de opio
en Afganistán y el Tratado de Prohibición de Ensayos Nucleares (CTBT).
El titular de la ONU inaugurará mañana una conferencia del
llamado Pacto de París sobre el combate al comercio ilícito de opio
en Afganistán, negocio con un peso notable dentro de la economía
afgana y que sirve para el financiamiento de grupos armados.
Según la oficina de de la ONU contra la droga y el delito, la
producción de opio en Afganistán aumentó un 133 por ciento en 2011
frente a 2010 y generó ingresos por mil 400 millones de dólares
(nueve por ciento del Producto Interno Bruto afgano).
La ONU estima que el 90 por ciento del consumo mundial de esa
droga proviene del opio cultivado en tierras afganas.
Durante su estancia en Viena, Ban Ki-moon participará también en
una ceremonia por el 15 aniversario de la creación de la comisión
preparatoria del CTBT, instrumento que cuenta ya con la ratificación
de 157 países y la firma de 182.
Hace dos semanas, el canciller de Indonesia, Marty Natalegawa,
depositó en la sede de la ONU en Nueva York los instrumentos de
ratificación de ese convenio.
De esa forma, ese país asiático salió de la lista de los llamados
Estados imprescindibles que deben integrarse al Tratado para su
entrada en vigor.
En un inicio, esa relación, conocida como Anexo-2 del CTBT,
abarcaba a 36 países, de los cuales solo quedan Egipto, China,
República Popular Democrática de Corea, India, Irán, Israel,
Pakistán y Estados Unidos.
El CTBT proscribe todas las explosiones nucleares y cuenta con un
régimen de monitoreo para su cumplimiento, compuesto por estaciones
que detectan pruebas en el océano, bajo tierra y en la atmósfera.
En la capital de Austria, el responsable de la ONU se
entrevistará también con el presidente de ese país, Heinz Fischer, y
el ministro de Relaciones Exteriores, Michael Spindelegger, informó