Desde el trono de su retroexcavadora

JULIO MARTÍNEZ MOLINA

PALMIRA, Cienfuegos. — Cada vez que conversas con alguien vinculado al sector de los ferrocarriles en esta provincia, te habla de Eduardo Reyes Calvo, un operador de retroexcavadora que emprende con esmero las tareas habituales de su labor, pero además posee otras particulares habilidades.

Con cerca de veinte años en el oficio, Eduardo comanda desde hace tres una moderna retroexcavadora KGTB, a cuyo frente —dice—, él se siente dueño de un reino particular donde todo funciona con diligencia, a la señal de este mando o a la activación de aquel mecanismo, por parte suya.

Con dicho equipo, el obrero acomete las rutinas diarias, consistentes básicamente en el drenaje de las líneas o zanjeo del perímetro adyacente al tendido férreo. Eso, tal cual comentan sus colegas y directivos, lo realiza de forma encomiable.

Sin embargo, él va a más. "También coloco traviesas o ubico balastros. Se me reconoce por lo primero, debido a mi forma de hacerlo: me he especializado en ponerlas debajo de los raíles". Para que lo conozca el lector, no resulta común que eso lo ejecute alguien que no sea un colocador de traviesas profesional.

"Yo abro el hueco con la retro, luego tomo la traviesa, la viro y la inserto. En disímiles oportunidades me convocan cuando existe algún fallo de este género en la vía", comenta el ferrocarrilero perteneciente a la Unidad Básica Empresarial de Vías y Puentes Cherepa, del municipio cienfueguero de Palmira.

Lo que él se reserva, aunque sí lo observan sus compañeros, es la increíble destreza y agilidad con la cual finaliza tal obra. Cuando uno aprecia cómo lo hace, casi en un santiamén, pero con notable calidad, se corrobora cuánto influye en la labor de cada cual el amor depositado en ella.

Su hijo Serguei, de los tres que tiene, progresa en el manejo del equipo gracias a las lecciones de su progenitor, quien le ha inculcado el amor por el oficio. Juntos pasaron en seis meses el curso para manejar la KGTB.

En virtud de sus capacidades, Eduardo fue seleccionado para participar en la recuperación capital del ferrocarril, en distintos territorios del país, por espacio de un año. Acaba de rendir faena, a lo largo de mes y medio, en el perímetro sureño de Aguada.

Considera que este empeño es una obra colosal e imperiosa, en la cual intervienen cada día muchos héroes con nombres y apellidos, entusiasmo y profesionalidad, como él.

 

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