El presidente Sebastián Piñera encabezará hoy la ceremonia de 
			promulgación de la ley que establece la Inscripción Automática y el 
			Voto Voluntario, norma que regirá a partir de los comicios 
			municipales de octubre de este año.
			La iniciativa legal recibió el visto bueno del Congreso en 
			diciembre pasado y representa un aumento del padrón electoral en el 
			país en casi cinco millones de votos, advirtió Prensa Latina.
			Chile pasará en consecuencia de ocho millones 100 mil electores a 
			13 millones.
			El gobierno chileno atribuye una gran significación a la reforma 
			electoral aprobada. De hecho, Piñera la comparó con el paso dado en 
			1949, cuando se aprobó el derecho de voto a las mujeres o el hito de 
			1958, cuando quedó fijada la cédula única de votación.
			El hecho de incorporar a casi cinco millones de electores es 
			equivalente asimismo a lo que ocurrió en 1874 cuando se estableció 
			el voto secreto y se eliminó el requisito de renta para poder votar, 
			ilustró el mandatario.
			Pese al respaldo parlamentario que recibió la referida norma 
			legislativa, sectores de la oposición e incluso referentes del 
			oficialismo sostienen que en materia electoral habría que ir a 
			transformaciones más de fondo, como la eliminación del sistema 
			binominal y el fortalecimiento de la participación ciudadana.
			Ha quedado demostrado que el sistema político institucional 
			chileno no sirve para resolver los problemas que hoy día tiene 
			nuestro país, afirmó el presidente del Partido Comunista de Chile, 
			Guillermo Teillier, en rueda de prensa el viernes pasado.
			En el Parlamento no está representada toda la diversidad y, 
			segundo, las instituciones no sirven para dirimir problemas de fondo 
			que atañen a todo el pueblo chileno como es el de la educación, citó 
			a manera de ejemplo.
			En opinión de Teillier, las elecciones municipales de fines de 
			este año podrían transformarse en una especie de plebiscito para 
			dirimir entre aquellos que están en Chile por mantener las cosas 
			como están y los que realmente quieren cambiarlas.