La población cubana menor de 31 años se encuentra vacunada contra
la hepatitis B aguda, una infección severa del hígado causada por un
virus que se adquiere por contacto directo con la sangre y otros
fluidos corporales como el semen, fundamentalmente.
La información fue ofrecida por la doctora Maira Fonte Reyes,
jefa del Programa Nacional de Hepatitis Virales y Vigilancia
Epidemiológica en Diálisis del Ministerio de Salud Pública, quien
señaló que "este exitoso resultado" se sustenta en las masivas y
sistemáticas campañas de inmunización con la vacuna cubana
Heberbiovac HB, de una alta eficacia y que brinda protección durante
toda la vida, producida por el Centro de Ingeniería Genética y
Biotecnología.
Desde 1992 el ciento por ciento de los niños al nacer comenzaron
a ser vacunados con la antihepatitis B y, en sucesivas campañas, la
inmunización contra este flagelo se extendió a los estudiantes y a
grupos de riesgo como los trabajadores de la esfera sanitaria y
pacientes sometidos a diálisis, entre otros.
Los resultados obtenidos están a la vista. Mientras que a
comienzos de la década de 1990 se diagnosticaron en el país 2 194
personas con hepatitis B aguda, el pasado año se registraron solo
25, todos mayores de 30 años.
A 20 años de iniciado este programa de inmunización, indicó la
doctora Fonte, consideramos que la enfermedad está controlada en el
país pero continúa siendo un problema de salud, atendiendo a la alta
prevalencia de la hepatitis B en los mayores de 30 años y teniendo
en cuenta también que el mayor riesgo de contraer esta dolencia es a
través de las relaciones sexuales no protegidas cuando en la pareja
hay un portador del virus.
Por ello las autoridades sanitarias mantienen estrategias de
inmunización y control estricto en las donaciones de sangre, a fin
de evitar que los pacientes devenidos crónicos puedan trasmitir la
infección a personas aún no inmunizadas.