Pese
a la presencia de los observadores que hoy visitan nuevas
localidades en Siria, los grupos armados perpetran sabotajes y
atentados contra importantes objetivos económicos, los civiles y las
fuerzas de seguridad.
Mientras, medios árabes y occidentales prosiguen su
campaña antisiria a la que ahora se sumó abiertamente el emir de
Catar, Hamad bin Khalifa al Thani, quien se decía hasta hace poco
"excelente amigo del presidente Bashar al-Assad", y ahora dijo estar
a favor de enviar a Siria una fuerza árabe de intervención.
Expresó tal opinión en declaraciones al programa "60
Minutos" de la cadena norteamericana CBS, según informó aquí la
agencia de noticia Cham Press.
Alegó que es partidario de tal despliegue para
detener lo que llamó "violencia mortal en Siria", la cual achacó al
gobierno, imputación en torno a la cual gira la ofensiva mediática y
política contra Damasco que silencia a su vez las acciones
terroristas de los grupos que han sido armados y financiados desde
el exterior.
Una de esas bandas detonó el sábado una bomba que
descarriló un tren de transporte de combustible entre los poblados
de Mahmabil y Bishmaroun, en la provincia de Idleb. Este mismo día,
Siria sepultó a otros 17 militares y policías, entre ellos un
teniente coronel y cuatro sargentos.
Esa comarca es fronteriza con Turquía, donde en dos
campamentos se concentran y entrenan fuerzas mercenarias que tratan
de infiltrarse en Siria, han afirmado varios medios e investigadores
europeos y de esta región.
El ministro de Electricidad, Imad Khamis, denunció
que estas acciones terroristas afectan la vida de la población, y
lamentó los reiterados ataques contra las líneas de transporte, y de
conductoras de combustibles que abastecen las termoeléctricas.
Se informó también que el sábado una banda armada
dañó una torre de alta tensión en Deir Ezzor, que formaba parte de
la red que enlaza las estaciones eléctricas de esa norteña región y
la colindante provincia de al-Hasaka.
Precisamente, el sábado un equipo de observadores
árabes recorrió localidades de Deir Ezzor, en tanto otros visitaron
el Hospital Provincial de Daraa y estuvieron en la ciudad de Sweida
donde conversaron con familias que han perdido miembros a manos de
los grupos armados.
En Tartous, un equipo de monitores visitó la Prisión
Central, el Hospital Militar y el centro asistencial privado al-Bassel.
Los medios nacionales también reportaron que en
Damasco Campo, las autoridades desmantelaron un número de artefactos
explosivos colocados por bandas armadas en las entradas de las
carreteras que conducen a Madaya, al-Zabani y a Sarghaya.
Uno de esos explosivos pesaba 50 kilogramos con un
radio destructivo de 150 a 200 metros y estaba equipado con un
detonador eléctrico, explicaron peritos a SANA, informó PL.