Los restos de la estación interplanetaria rusa Fobos-Grunt
podrían caer en el océano Pacífico, cerca de las costas de Chile,
según correcciones de datos de su trayectoria anunciados este sábado
por la agencia Roskosmos.
Tras su entrada en la atmósfera de la Tierra deberán quedar unos
20 fragmentos de la nave, con una masa de unos 200 kilogramos,
reportaron fuentes de la dependencia, reporta Prensa Latina.
Fogos Grunt, lanzado con una masa inicial de 13 mil 505
kilogramos el pasado 9 de noviembre desde el cosmódromo kazajo de
Baikonur, debió activar motores adicionales y una batería solar que
le permitiría viajar a uno de los satélites naturales del planeta
Marte.
Pero una falla en el sistema por motivos aún desconocidos impidió
la maniobra y el aparato se mantuvo desde entonces en una órbita
cercana a la Tierra hasta perder altura y acercarse a la atmósfera.
En un principio, se mencionó la posibilidad de que las partículas
más sólidas de Fobos Grunt se desplomarían en una zona del Océano
Indico, cerca del territorio afgano.
Recientemente, el jefe de Roskosmos, Vladimir Popovkin, admitió
la posibilidad de la influencia de una fuerza externa en el fracaso
de la misión del referido ingenio espacial ruso, cuyo costo supera
los cinco mil millones de rublos (unos 157 millones 252 mil
dólares).
Tampoco sabemos por qué se producen tantas fallas en los últimos
tiempos con los lanzamientos rusos, apuntó.
Además, desconocemos que ocurre cuando nuestros aparatos vuelan
en la zona oscura de la Tierra, donde casualmente se encuentran
Estados Unidos y Canadá, y ni los vemos ni contamos con sus datos
telemétricos, señaló el especialista.
Para 2013, surgirá un sistema espacial con base cósmica para
monitorear en tiempo real todo el movimiento de nuestros satélites y
para protegerlos de posibles acciones externas, adelantó Popovkin.