Representantes de la insurgencia sudanesa acusaron este sábado al
gobierno de bombardear zonas pobladas de forma indiscriminada.
Voceros rebeldes precisaron sobre los efectos de las incursiones
aéreas en territorios de Kordofán del Sur con balance de muertos y
heridos entre la población civil, reporta Prensa Latina.
Mubarak Abdelrahman Ahmed, miembro de un denominado grupo joven"
dentro del Movimiento Popular para la Liberación de Sudán-Sector
Norte (MPLS-N), denunció las secuelas de un bombardeo el 7 de enero
pasado.
La operación en la localidad de Angola causó nueve muertos y 26
heridos, en tanto otras siete personas perecieron durante otro
ataque al día siguiente, según el representante opositor.
El gobierno, por su parte, desmintió las alegaciones del mando
insurrecto, aunque admitió que sus Fuerzas Armadas condujeron en los
últimos días una "vasta operación" contra posiciones rebeldes en esa
región.
Un portavoz del ejército sudanés, Sawarmi Khaled Saad, desestimó
la existencia de esos bombardeos y aseguró no tener noticias sobre
muertos y heridos".
Otros cinco soldados y tres rebeldes resultaron muertos en un
choque entre tropas regulares y rebeldes, el martes y el miércoles
pasados.
Kordofán del Sur, fronteriza con la República de Sudán del Sur,
es base principal del MPLS-N y la provincia de mayor potencial
petrolero que conserva Sudán después de la separación del sur 9 de
julio pasado.
Los enfrentamientos en esa región entre el gobierno sudanés y el
MPLS-N, fuerza nacida del Movimiento Popular de Liberación de Sudán
(MPLS) que gobierna en Sudán del Sur, comenzaron el 5 de junio
pasado.
Jartum y Juba firmaron un acuerdo de alto el fuego que nunca
cumplieron y mantienen mutuas acusaciones sobre violaciones
fronterizas, entre ellas las referidas a un presunto apoyo del
flamante país sureño a la guerrilla sudanesa.