Diversos grupos étnicos de Honduras sufren los desalojos de
tierras ocupadas a pesar del compromiso del Gobierno para que tal
situación deje de ocurrir de manera definitiva.
Pese a la posición gubernamental, los supuestos propietarios de
los territorios han acudido a la vía judicial para expulsar a
indígenas y garífunas en Copán, Yoro, Roatán y el sector de Colón,
según informes periodísticos, reporta Prensa Latina.
Es algo inhumano, el presidente Porfirio Lobo se comprometió a
que las tierras serían adquiridas para la ampliación de las
comunidades, manifestó el titular de la Secretaría de los Pueblos
Indígenas y Afrohondureños, Luis Green.
Aseveró que recientemente se abrió un diálogo con el ministro
director del Instituto Nacional Agrario, César Ham, en aras de
encontrar soluciones a dicho tipo de problemas.
El director de Derechos Humanos de la mencionada secretaría,
Nahún Misael Batiz, precisó que muchas de las denuncias tienen
relación con el mecanismo de la frontera agrícola que va desplazando
a los pueblos afectados.