El deterioro del Coliseo romano adquiere mayor dimensión con la
caída este sábado de otros dos fragmentos del histórico monumento,
el más simbólico y más visitado de la capital italiana, informaron
en Roma medios locales.
Al calificar la situación, el superintendente de Bienes
Culturales de Roma, Umberto Brócoli, consideró que aún no es grave y
que está en curso una inspección, reporta Prensa Latina.
El episodio se produjo un mes y medio después de que cayeran
algunos fragmentos de toba en la parte delantera del Arco de
Costantino.
Por su parte la directora del Coliseo, uno de los monumentos más
famosos de la antigüedad clásica, anunció que en marzo próximo se
colocarán andamios para la restauración financiada por el empresario
Diego Della Valle.
Durante el pasado 11 de noviembre, el entonces subsecretario de
Bienes Culturales, Francesco Giro, informó que el Coliseo tenía
"tres mil lesiones", en su mayoría pequeñas fisuras que no son
alarmantes.
Giro agregó que preveían reparar esas grietas cuando arrancaran
los trabajos de restauración general del monumento, de dos mil años
de antigüedad, designado una de las nuevas Siete Maravillas del
Mundo.
El Coliseo romano, declarado Patrimonio de la Humanidad en 1980
por la Unesco, es visitado por más de seis millones de personas al
año y suma ingresos por concepto de venta de entradas por unos de 30
millones de euros.
Los trabajos de reestructuración integral de ese monumento, un
icono de la Roma imperial, que iniciarán en marzo próximo costarán
unos 26 millones de euros, según los expertos.