El sepelio se ofició después de las oraciones musulmanas y se
prolongó varias horas con movilizaciones espontáneas de residentes
en Teherán y de autoridades del Gobierno que acudieron al ritual
fúnebre, informa PL.
Entretanto, el embajador iraní ante las Naciones Unidas, Mohammad
Khazaee, pidió al organismo internacional que condene el asesinato
del joven científico.
En una carta enviada al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon,
y a los presidentes del Consejo de Seguridad y de la Asamblea
General, Khazaee dijo que su país tiene "pruebas certeras de que
ataques terroristas de este tipo son apoyados por algunos países
extranjeros como Israel", cita ANSA.
El ataque "forma parte de los esfuerzos de ciertos ambientes
extranjeros para sabotear y neutralizar el programa nuclear pacífico
de Irán", afirma el embajador, que pide una condena fuerte por el
atentado.
Por otra parte, el presidente de Irán, Mahmoud Ahmadinejad,
abandonó hoy Ecuador, país en el que cerró su gira latinoamericana
que lo llevó también por Venezuela, Nicaragua y Cuba.