Los principales candidatos a la nominación republicana para las
elecciones presidenciales lanzan este jueves advertencias sobre sus
planes de hacer la guerra contra Irán en contraposición a la
política de sanciones que impulsa el gobierno.
Como parte de sus planes de retomar la Casa Blanca, la mayoría de
los aspirantes del partido opositor son proclives a adoptar acciones
más fuertes contra Teherán, acusando al presidente estadounidense,
Barack Obama, de debilidad ante los planes iraníes de proseguir su
programa pacífico de uso de la energía nuclear, reporta Prensa
Latina.
La oposición le reprocha al mandatario no haber podido imponer
sanciones más fuertes contra el gobierno islámico, al que acusa de
trabajar para dotarse de un arma nuclear.
Mitt Romney dijo en Carolina del Sur, durante un acto de campaña,
que si Obama es reelegido, Irán tendrá un arma nuclear.
Si ustedes eligen a Mitt Romney ellos no tendrán el arma nuclear,
expresó en lo que es interpretado como una velada advertencia de que
iría más allá de las sanciones.
Mientras, Newt Gingrich, otro de los contendientes, manifestó su
objetivo de derrocar al régimen iraní en el año que siguiera a su
llegada al poder,
Mientras, el exsenador Rick Santorum comparó a Obama con el
expresidente demócrata James Carter, cuya aspiración a un segundo
mandato fracasó en 1980 por su manejo de la crisis de los rehenes en
Irán.
Mientras, dos influyentes miembros del Comité de Seguridad
Nacional del Senado, el independiente Joe Lieberman y el senador
republicano Lindsey Graham manifestaron su oposición a cualquier
estrategia de aceptar y tratar de contener a un Irán con armas
nucleares, calificando ese enfoque de un error catastrófico.
Ambos congresistas estiman que Washington debe tomar todas las
medidas diplomáticas para tratar de impedir que Irán desarrolle un
artefacto atómico.
Los parlamentarios advirtieron que cuando se trata de hacer
frente a esa presunta amenaza todas las opciones deben estar sobre
la mesa, descartando una política de contención.
En ambiente belicista entre los republicanos estadounidenses
tiene lugar en momentos en que Teherán alcanzó un acuerdo sobre el
tema nuclear con el llamado Grupo 5+1.
El referido entendimiento con los cinco países miembros
permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU + Alemania, bajo
supervisión del Organismo Internacional de la Energía Atómica, debe
ayudar a solucionar el contencioso con la nación persa, estiman
expertos.