El Ministerio Público de Bolivia alista el juicio oral contra al
menos 39 acusados de terrorismo y de tramar divisiones a través de
una célula mercenaria europea, anunció hoy el fiscal Marcelo Soza.
Estamos preparados con todas la pruebas y las evidencias para
demostrar que malos ciudadanos han querido dividir al país y a eso
apuntamos, precisó Soza, quien investiga el Caso Terrorismo I desde
mediados de abril de 2009.
La causa investiga a un grupo de mercenarios europeos contratados
con financiamiento interno para desestabilizar el gobierno de Evo
Morales y crear divisiones, reiteró el magistrado.
Una operación élite de la policía boliviana desarticuló esa
célula terrorista en un céntrico hotel de la ciudad de Santa Cruz
(este), encabezada por el boliviano-croata Eduardo Rózsa, quien
murió en la acción junto a dos de sus colaboradores, mientras otros
dos miembros de la banda fueron capturados.
Según el procedimiento, el juez de la causa tiene que remitir las
pruebas de cargo, descargo y el cuaderno del control al Tribunal de
Sentencia, instancia que concluida la lectura de alegatos en
conclusiones, sentenciará a los acusados por el delito de
terrorismo.
Soza recordó que la investigación que lleva adelante tiene
relación directa con el grupo de mercenarios financiados por grupos
secesionistas que pretendían ensangrentar y dividir al país.
De acuerdo con la indagación de la fiscalía, la asociación
ilícita planeó replicar en Bolivia lo sucedido en África, Croacia y
los Balcanes, es decir, dividir al país a través de una ola de actos
y atentados terroristas, según probaron las autoridades.
Con la desarticulación del grupo irregular en el hotel Las
Américas de la ciudad de Santa Cruz, se evitaron hechos de sangre de
enorme dimensión, apuntó.
El fiscal recordó que el rumano Arpad Magyarosi y el irlandés
Dwyer Michael Martin fueron abatidos junto a Rózsa durante el choque
armado con la disuelta Unidad Táctica de Resolución de Crisis, de la
Policía Boliviana.
De ese enfrentamiento sobrevivieron Mario Tadic y Elot Tóasó,
recluidos en cárceles de La Paz. Además de los mencionados, hay
otros acusados entre detenidos y prófugos, advirtió el fiscal,
informó