Un brote de leptospirosis causó la muerte de ocho personas, con
una cifra de 300 casos reportados, según reconocieron fuentes del
Ministerio de Salud de Filipinas.
La aparición de la enfermedad obligó a decretar un estado de
alerta general y de acuerdo con especialistas se agravó debido a los
efectos de las recientes inundaciones que dañaron la infraestructura
del sector.
Los hospitales están llenos, informaron diversos medios de
prensa, incluso por centenares de miles de afectados por la
destrucción de sus hogares y que todavía sufren las consecuencias
del tifón Washi.
El mencionado fenómeno meteorológico causó mil 257 muertos en
Filipinas y graves inundaciones en Tailandia y Vietnam, entre otras
naciones del sureste asiático, señaló Prensa Latina.
Filipinas, con cerca de 96 millones de habitantes, posee un
sistema de salud que se concentra sobre todo en las ciudades y
mantiene graves disparidades entre las casi mil 800 islas que forman
el archipiélago.
Los sucesivos gobiernos, de acuerdo con medios informativos
locales, disminuyen constantemente el presupuesto destinado a la
salud, que llegó apenas al 3,8 por ciento del Producto Interno Bruto
(PIB), una cifra que ubica a esta nación en el lugar 168 a nivel
mundial.