Autoridades iraquíes asumieron este viernes el control de la base
Imán Alí en la ciudad sureña de Nasiriyah, con la cual concluyó el
traspaso de instalaciones militares estadounidenses antes de la
retirada definitiva este fin de año, informó Prensa Latina.
La base, conocida por las tropas norteamericanas como Campo Adder,
albergó a unos 15 mil soldados de Estados Unidos en el momento más
álgido de la guerra desatada en esta nación árabe tras la invasión
militar de marzo de 2003 para derrocar a Saddam Hussein.
El proceso de entrega lo encabezaron el coronel estadounidense
Richard Kaiser y Hussein Al-Assadi, el funcionario del gobierno de
Irak encargado de las transferencias de campamentos castrenses.
Imán Alí fue la última de las 505 bases que tuvo el Pentágono
aquí y su devolución ocurrió un día después de un acto en Bagdad
para arriar y guardar la bandera, poniendo así fin a casi nueve años
de ocupación.
En su discurso, el secretario de Defensa estadounidense, Leon
Panetta, elogió lo que valoró de sacrificios extraordinarios, pese a
que dejan tras sí más de 100 mil muertos iraquíes y un país
devastado, inseguro y con violencia sectaria.
Entretanto, Al-Assadi señaló que la instalación situada al
suroeste de Nasiriyah marcó el paso final antes de completar la
retirada de Irak de los soldados extranjeros, en virtud de un
acuerdo firmado en diciembre de 2008 que fijó como plazo el último
día de este año.
Anunciamos con orgullo hoy al pueblo iraquí la entrega de la
última base militar norteamericana. Hoy estamos pasando la última
página de la ocupación, apuntó Al-Assadi en nombre del primer
ministro Nouri Al-Maliki, quien regresó ayer a Bagdad tras una
visita a Washington.
Luego del izamiento de la bandera iraquí, el nuevo comandante de
la base, el teniente coronel de las fuerzas aéreas Hakim Aboud,
describió la jornada como un día de libertad y prometemos a nuestro
pueblo ser fieles a nuestro Ejército, a nuestro Irak y a actuar por
su unidad.
De acuerdo con fuentes castrenses en Bagdad, aún permanecen unos
cuatro mil soldados norteamericanos en el país, una cifra ínfima
tomando en cuenta que desde 2003 pasaron por Irak más de 1,5
millones de estadounidenses y que en 2007 hubo hasta 170 mil
uniformados.
Asimismo, se confirmó que la jefatura de la Organización del
Tratado del Atlántico Norte (OTAN) formalizará este sábado en una
ceremonia solemne la salida de sus efectivos de Irak, también
acelerada debido a la negativa de Bagdad de conceder inmunidad
judicial a esos hombres.
El presidente estadounidense, Barack Obama, anunció en octubre el
fin de la ocupación luego de fracasar sus presiones para que el
Parlamento iraquí accediera a proteger judicialmente a los cerca de
seis mil soldados que pretendía dejar aquí con fachada de
entrenadores.