La industrialización metalúrgica, la inversión en la producción
alimentaria, creación de políticas de empleo y la seguridad
ciudadana son debatidas por organizaciones sociales bolivianas en la
cumbre que hoy culmina aquí, dio a conocer Prensa Latina.
Medio millar de representantes de instituciones y organizaciones
sociales asisten en el Encuentro Plurinacional que concluirá este
miércoles, después de discutir sobre desarrollo económico, seguridad
y soberanía alimentaria, salarios, empleo y estabilidad laboral,
servicios básicos y vivienda, entre otros temas.
El inicio de procesos de fundición y refinación constituyó la
propuesta central de la comisión de minería, afirmó el ministro del
ramo, José Pimentel.
El proceso de industrialización estuvo paralizado durante 30
años, señaló el titular respecto al diagnóstico que inició el debate
del tema.
Se informó a las organizaciones que participan en esta comisión
que se espera la concreción de proyectos de fundición y refinación
para el próximo año. Asimismo, se prevé la firma de un contrato para
habilitar dos refinerías de zinc.
Pimentel detalló que para la ejecución de los proyectos será
fundamental la participación del sector privado, aunque recordó se
tiene un financiamiento asegurado de mil 300 millones de dólares
para esos planes.
Según el viceministro de Desarrollo Rural, Víctor Hugo Vázquez,
la comisión de Tierra y Seguridad Alimentaria planteó que los
municipios inviertan más recursos económicos para la producción de
alimentos.
Las discusiones de esta comisión se centraron en seis puntos
relevantes: producción, tierra, riego, mecanización, inversión para
el sector productivo, transformación e industrialización y apertura
de mercados.
Para el funcionario, los pequeños, medianos, grandes productores
y empresarios privados solicitaron se exija la misma medida para las
gobernaciones.
En otros temas, organizaciones económicas campesinas indígenas y
originarias pidieron una ley para prohibir "la extranjerización de
tierras" en Bolivia, afirmó su principal representante, Carlos León.
El Gobierno realiza la titulación del 64 por ciento de 2,9
millones de hectáreas de tierras cultivables, pero 13 por ciento es
obtenida por extranjeros, explicó. Una investigación del sector
estableció que por lo menos un millón de hectáreas de soya están en
manos de 200 a 300 brasileños, argentinos, menonitas y japoneses,
entre otras nacionalidades.
Precisó León que los extranjeros no pagan impuestos por la tierra
ni tampoco tienen retenciones por utilidades, mientras se benefician
del subsidio del diesel.
Asimismo, empresarios, analistas y académicos coinciden en forjar
resultados dirigidos a crear más empleos y mejorar los ingresos de
los bolivianos.
El presidente de la Confederación de Empresarios Privados de
Bolivia, Daniel Sánchez, señaló que la meta común es consolidar una
mejor economía y producción, así como mayor cantidad de empleos.
Por su parte, el analista económico Julio Alvarado calificó de
positivo ese encuentro, subrayando que lo más importante es lograr
un pacto entre todos los bolivianos para terminar de sacar al país
de la pobreza.
Para la rectora de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA),
Teresa Rescala, este evento debe sumar actores y propuestas que
permitan mejorar la calidad de vida de los bolivianos, priorizando
la generación de empleos.
La UMSA gradúa alrededor unos cuatro mil profesionales al año.
Ellos requieren espacios laborales igual que los profesionales de
otras universidades del país. Por lo tanto, es urgente pensar en
políticas de empleo, sustentó.
Por su parte, el ministro de Gobierno, Wilfredo Chávez, afirmó
que el fortalecimiento de la Policía en cuanto a dotación,
infraestructura y educación, para mejorar la seguridad ciudadana
destacó en la comisión bajo su presidencia.