Irán exigió hoy disculpas formales del presidente estadounidense,
Barack Obama, por el espionaje de un avión no tripulado derribado
recientemente, y rechazó su solicitud de devolución del aparato,
mientras acusó a 15 supuestos agentes encubiertos.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Ramin
Mehmanparast, criticó al mandatario de Estados Unidos por reclamar
que la República Islámica entregue el aparato del tipo drone RQ-170
Sentinel abatido en la región fronteriza con Afganistán.
En lugar de pedir la devolución, Obama debería disculparse
formalmente con Irán por quebrantar el espacio aéreo del país,
subrayó Mehmanparast en su habitual encuentro de los martes con
periodistas nacionales y extranjeros.
Para el vocero de la cancillería, el mandatario norteamericano
olvidó que el avión violó el espacio aéreo iraní para espiar y opinó
que tal acción equivale a una violación de las leyes y regulaciones
internacionales, e interfiere en los asuntos domésticos del país.
Agregó que actos ilógicos como esos podrían hacer peligrar la paz
y la seguridad globales, y los norteamericanos deben aceptar sus
consecuencias.
Por su lado, el ministro iraní de Defensa, Ahmad Vahidi, rechazó
las declaraciones hechas ayer en Washington por Obama durante una
rueda de prensa con el primer ministro iraquí, Nouri Al-Maliki, en
las que llamó a Teherán a regresar el aparato derribado.
El drone de espionaje estadounidense es ahora propiedad de Irán y
nuestro país decidirá qué pasos dará al respecto, sentenció Vahidi
en respuesta al inquilino de la Casa Blanca sobre el artefacto
abatido el 4 de diciembre cuando cruzó desde Afganistán y penetró
250 kilómetros.
La televisión estatal informó ayer que expertos militares estaban
en las etapas finales de recabar información del artefacto, la cual
se usará para presentar una demanda contra Estados Unidos por
invasión, según adelantó el diputado Parviz Sorouri, de la comisión
de seguridad.
Entretanto, el fiscal de Teherán Abbas Jafari-Dolatabadi anunció
que el Poder Judicial de Irán emitió acusaciones contra 15
individuos por supuestas acciones de espionaje contra el país
mediante el suministro de información a Estados Unidos e Israel.
Aunque las fuentes oficiales no revelaron la identidad de los
sospechosos, se remitieron a declaraciones del Ministerio de
Inteligencia del 21 de mayo pasado en las que confirmó la detención
de una red de 30 espías de la CIA y la identificación de otros 42
agentes, reportó Prensa Latina.