El excepcional rigor técnico e intelectual con que la editora
Esther Acosta Testa ha acometido su trabajo con libros de alta
complejidad, así como la gestión de textos, la gestación, el
sostenimiento de colecciones, y la organización de los procesos
editoriales fue consideración medular para que le fuera otorgado
ayer, en el capitalino Centro Cultural Dulce María Loynaz, el Premio
Nacional de Edición 2011.
Presidido por Silvana Garriga, Premio Nacional de Edición 2010, e
integrado, además, por Eduardo Heras León, Premio Nacional de
Edición 2001, Thelma Hortensia Jiménez, Blanca Rosa Zabala y Daniel
Díaz Mantilla, el jurado —que de entre otras 15 propuestas la
seleccionó por mayoría— le reconoció también a la destacada
intelectual su larga trayectoria en el sistema editorial cubano, en
el cual ha fungido como editora, redactora jefa y subdirectora de
varias de sus editoriales.
Con este reconocimiento que confiere desde 1998 el Instituto
Cubano del Libro se distingue la obra de editores que con su talento
y desempeño profesional honran el universo editorial cubano.
La ceremonia de premiación tendrá lugar en la Sala Nicolás
Guillén ubicada en la Fortaleza de San Carlos de la Cabaña, en el
contexto de la próxima Feria Internacional del Libro.