La presidenta argentina, Cristina Fernández, inició este sábado
su segundo mandato con un enfático llamado a los legisladores para
que aprueben dos leyes que consideró fundamentales: la de Tierras y
la Penal Tributaria.
Espero que pueda acelerarse la discusión del proyecto de la Ley
de Propiedad de la Tierra en la República Argentina, que ya mandé,
pero no ha sido tratado, porque se trata de preservar un recurso
estratégico, sostuvo Fernández en su discurso de toma de posesión,
reporta Prensa Latina.
La jefa de Estado citó estadísticas de la Organización Mundial de
la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés), según las cuales un
10 por ciento de las tierras de esta nación suramericana están en
manos extranjeras.
El proyecto remitido por el Ejecutivo al parlamento limita a un
20 por ciento la suma de propiedades extranjeras sobre el total de
tierras disponibles en el país y a un máximo de mil hectáreas por
persona física o jurídica, si bien no modifica los derechos
adquiridos por los actuales terratenientes.
Cristina Fernández ya había hecho un reclamo similar ante la
Cámara de Diputados, cuando en marzo último presentó su cuarto
informe de gobierno y demandó protección para este recurso
estratégico no renovable.
Entonces, señaló que el texto que debe aprobarse tiene que ser
suficientemente inteligente para que no tenga un sesgo anti-inversor
que nos plantee a los argentinos como xenófobos y refractarios a
cualquier tipo de inversión.
Respecto a la Ley Penal Tributaria, la mandataria consideró
también necesaria y urgente su aprobación a fin de poder castigar a
quienes roban al fisco.
El pedido de Fernández a la Asamblea Legislativa se produjo poco
después de referirse a algunos comentarios aparecidos en medios de
prensa, los cuales señalan a su gobierno como el que menos leyes
sancionó.
Después de restar importancia a tales apreciaciones, indicó que
le hubiera bastado con la sola aprobación de tres leyes ya vigentes:
la de Medios, la que puso bajo administración estatal los fondos de
jubilaciones y pensiones, y la de movilidad obligatoria para
recuperar los haberes de los jubilados.
La mandataria agradeció por otra parte a quienes creyeron y
acompañaron este proyecto colectivo nacional, popular y
profundamente democrático, y a los que resistieron a pie firme los
momentos más difíciles que lo tocó vivir como gobierno y como
movimiento político (el Frente para la Victoria).
Por último, ratificó su compromiso de seguir trabajando, con
todos y por todos, por una Argentina más justa, equitativa y
solidaria.