Los proyectos de documentos finales de la XVII conferencia ambiental de Naciones Unidas continúan generando descontento entre los delegados y miembros de la sociedad civil que asisten a la cita.

Son una traición a la necesidad de salvar el planeta, ignoran el reclamo urgente de millones de personas en este mundo, comentó a Prensa Latina la estadounidense Caitte Waddick, investigadora en temas de administración y planificación ambiental y regional.

En su opinión, la COP17, sigla en inglés que identifica esta conferencia de las partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, está defraudando a los más vulnerables en diversas partes del mundo.

Estuve siguiendo las sesiones plenarias, y es evidente que los países desarrollados no quieren asumir metas de mitigación ambiciosas, comentó la joven, quien la víspera participó en la manifestación de los indignados climáticos, la cual intentó llegar a la sesión plenaria del foro, pero fue bloqueada por guardias de seguridad de la ONU.

Participé del movimiento Ocupar la COP17 porque es una forma de expresar solidaridad con las víctimas del cambio climático, enfatizó Waddick.

Por su parte, Juan Carlos Soriano, miembro de la organización 350.org, consideró que la manifestación de los indignados mostró el gran descontento con estas negociaciones.

Hay un nivel de ambición muy bajo, estamos negociando algo que se debió terminar en 2009, y ahora muchos países como Estados Unidos y los de la Unión Europea salen con unas nuevas negociaciones que se van a terminar en 2020, comentó a Prensa Latina.

En su opinión, la ciencia es muy clara al decir que la humanidad necesita comenzar a reducir la concentración de carbono en la atmósfera desde el 2015 como fecha tope.

Esperar hasta el 2020 es muy tarde, mi organización 350.org tiene el nombre por el nivel máximo seguro de dióxido de carbono en la atmósfera, explicó.

De acuerdo con Soriano, actualmente existe una concentración de 392 partes por millón de dióxido de carbono, y ha sido evidente lo que esa cifra puede hacer en nuestro planeta.

Desde las inundaciones en Centroamérica y en Tailandia, las sequías en el Cuerno de África, incluso aquí en Durban cuando llegamos hubo unas lluvias torrenciales que nunca antes se habían visto, reflexionó el activista.

En el Centro Internacional de Convenciones de Durban predomina el escepticismo.

Equipos de negociadores reiniciaron esta mañana las pláticas por bloques regionales y otros países, entre ellos el Grupo de los 77 más China, la Unión Europea, el Grupo Africano y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América.

El documento presentado la víspera como proyecto de decisión de la conferencia sólo supone un compromiso de sentarse a platicar el venidero año un acuerdo que esté listo en 2015 para tener "un nuevo marco legal aplicable para todos" alrededor de 2020.

Además de esos tecnicismos y lenguaje retórico, el borrador no incluye una enmienda al Anexo B del Protocolo de Kioto con nuevas metas de mitigación de los gases de efecto invernadero para los países industrializados, máximo reclamo en esta cita de las naciones subdesarrolladas.

Aún se desconoce a qué hora comenzará la sesión plenaria de este sábado, anunciada la víspera por la presidencia tras la imposibilidad de hallar un consenso el viernes, cuando debió concluir el foro.

Fue hace solo unos minutos que comenzó a circular el otro borrador clave de la conferencia, el proyecto de decisión del Grupo de Cooperación a Largo Plazo de la Convención, que debe servir de base legal al instrumento jurídico encargado de suceder en un futuro al Protocolo de Kioto.