Siria e Irak, que se opuso a las sanciones de la Liga Árabe,
evalúan incrementar los vínculos comerciales y de inversiones,
mientras Damasco analiza vías para aumentar la cooperación con la
Organización de Desarrollo Industrial de la ONU (UNIDO).
este viernes la prensa en Damasco reporta que el director de la
Junta de Inversiones de Siria, Ahmad Diyab, recibió en Damsco a una
delegación de empresarios iraquíes para discutir la ampliación del
intercambio mercantil y las inversiones en ambas vías, informa
Prensa Latina.
Diyab exhortó a los visitantes a aprovechar la oportunidad que
brindan los beneficios del Decreto No. 8, pronto a entrar en vigor,
el cual facilitará incentivos a los inversores en Siria.
El jefe de la delegación iraquí, Asaad Baki Haidar, de la empresa
Erbril-Drasco, dijo que el grupo está interesado en la industria de
los alimentos y el sector de los bienes raíces y expresó interés por
reforzar el comercio entre los dos países.
El 25 por ciento de las exportaciones de IraK terminan en el
mercado sirio; un monto similar de productos fluye hacia el iraquí.
La agencia de noticias siria SANA reportó desde Viena que Siria
estudió vías y mecanismos para implementar programas de cooperación
con la UNIDO, en particular la segunda fase de un proyecto de
modernización industrial que ya se ejecuta, así como el desarrollo
de un plan agrícola.
Las discusiones tuvieron lugar al margen de la XIV Conferencia
General de UNIDO el jueves en la capital austriaca.
El ministro de Industrias sirio, Adnan Salkho, analizó con el
director-general de UNIDO, Kandeh Yumkella, la posibilidad de
encontrar financiamiento de organizaciones internacionales y
organismos donantes para esos proyectos.
Siria enfrenta una ola de sanciones dictadas por Estados Unidos y
la Unión Europea, que arrastraron a la Liga Árabe a hacer lo mismo,
mientras la vecina Turquía las anunció el miércoles.
El gobierno de Damasco comenzó a adoptar medidas internas para
aliviar los efectos que esas represalias tendrán sobre la población,
al tiempo que optó por separarse de la Unión por el Meditarráneo, un
esquema de asociación y colaboración entre estados europeos y de
África del Norte, el Oriente Medio y los Balcanes hasta tanto los
países reconsideren las sanciones.
Igualmente, suspendió el Acuerdo de Zona de Libre Comercio con
Turquía. El intercambio mercantil entre estos dos países vecinos
había aumentado sustancialmente en los últimos cinco años.