La justicia castrense mexicana sentenció a 14 militares por el
asesinato de civiles y otras lesiones, con sanciones entre 16 y 40
años de cárcel, según comunicado de la Secretaría de la Defensa
Nacional (Sedena) difundido hoy.
Un comandante, un oficial y 12 soldados recibieron las sanciones
del Segundo Consejo de Guerra Ordinario Permanente por lo sucedido
el 1 de julio de 2007, cuando atacaron a cinco integrantes de una
familia en el puesto de control La Joya, en Sinaloa.
Este caso surgió de una recomendación de la Comisión Nacional de
Derechos Humanos (CNDH), aunque la Sedena aclaró que si bien los
hechos se derivaron de un lamentable error, la justicia militar
actuó de manera transparente e imparcial.
Los hechos relatan que por el citado puesto de control cruzó la
camioneta de Adán Abel Esparza, con su esposa, hermana, y sus hijos
de siete, cuatro y dos años, respectivamante, cuando militares les
gritaron el alto y comenzaron a disparar.
En el incidente, documentó la CNDH, murieron los tres niños, las
dos mujeres y resultaron lesionados tres civiles más.
En el comunicado no se precisan los nombres de los sancionados, a
quienes se les determinó además el resarcimiento de los daños
ocasionados.
Según este ministerio, unos 45 mil efectivos de las fuerzas
armadas están desplegados por todo el país, como parte de la
estrategia de seguridad nacional del actual presidente Felipe
Calderón.
Esa política se centra en el combate al narcotráfico y la
delincuencia organizada, el cual suma más de 50 mil muertos, 10 mil
desaparecidos y 120 mil desplazados en los últimos cinco años,
indicó Prensa Latina.
De acuerdo con el comunicado de la Sedena, del 2006 a la fecha,
solo el 1,53 por ciento de quejas contra militares ante la CNDH ha
resultado con responsabilidad.