El presidente del Partido Comunista de Chile, Guillermo Teillier,
rechazó la arremetida del gobierno contra la izquierda en el actual
contexto de movilizaciones sociales, señaló Prensa Latina.
La víspera, durante un acto con Carabineros en esta capital, el
ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, impugnó a la izquierda
chilena y la responsabilizó de poner zancadillas a La Moneda en la
lucha contra la delincuencia.
Nos hemos comprometido a luchar contra la delincuencia y a favor
del orden público, enfrentando todas las críticas que algunas
personas de izquierda, fácticos del mundo de la izquierda siempre
plantean, señaló Hinzpeter.
La izquierda tiene históricamente un concepto y una valoración
distinta de la tranquilidad pública, agregó el titular del Interior,
quien negó además acusaciones de la oposición chilena sobre montajes
fabricados por el gobierno para justificar la criminalización de la
protesta social.
Teillier respondió al respecto que los poderes fácticos vienen de
la dictadura y llamó a Hinzpeter a un examen de conciencia y a
reconocer que sí han existido montajes durante el mandato de
Sebastián Piñera.
Yo creo que al ministro en los genes le queda mucho de ese
autoritarismo que sometió a tantos chilenos a la brutalidad de la
represión de una dictadura y estaría bueno que se hiciera un examen
de conciencia, afirmó el timonel de los comunistas chilenos.
En relación con los puntos de vista dispares acerca de la
tranquilidad ciudadana, Teillier comentó que claramente tenemos
pensamientos muy distintos respecto a la tranquilidad de un país y
el derecho de las personas; nosotros nunca hemos dado un golpe de
Estado en nuestro país ni hemos tenido una actitud fascista.
Enfatizó que lo que está pasando en Chile es el resultado de la
falta de visión del gobierno al no aquilatar que se viven tiempos
distintos y al optar por la represión: la gente quiere participar y
los movimientos sociales quieren ser escuchados; no se puede seguir
reprimiendo.
Añadió que Hinzpeter se cree que porque está al frente de los
servicios represivos tiene una especie de poder omnímodo. Ilustró,
en ese sentido, que insista en encauzar en el Parlamento la
denominada ley de resguardo del orden público.
Creemos que no corresponde; en Chile ya tenemos suficientes leyes
represivas para perseguir a quienes realmente cometen un delito y no
a quienes protestan por malas políticas del gobierno.
Sobre la nueva escalada de movilizaciones que se avecina, el
presidente del Partido Comunista estimó que la reacción del gobierno
está por ver: se puede esperar cualquier cosa, porque algunas veces
alaban a los estudiantes y las otras les dan palos y los reprimen
fuertemente.