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Once años de una universidad popular
El espacio Universidad para Todos prepara nuevos
cursos para continuar apoyando la formación general integral del
pueblo
OLGA DÍAZ RUIZ
Hace pocos días una institución docente múltiple, que funciona
como sistema universitario y constituye un ejemplo de
democratización de la cultura, arribó a su onceno aniversario de
creada: Universidad para Todos ha crecido, con el propósito de
saciar las ansias de saber de la población cubana.
Desbordar
el marco de las aulas para socializar el conocimiento es una
oportunidad única, destaca Reinaldo Sánchez.
Una experiencia sui generis la de este espacio, que
consolida la formación general integral del pueblo con el reto de
acercar la educación al hogar; y que, al mismo tiempo, ha
contribuido a cambiar los métodos, nociones y formas de hacer
televisión en nuestro país.
Desde su primera edición el 2 de octubre del 2000, el programa
Universidad para Todos ha impartido, de manera ininterrumpida a
través de la televisión nacional, 125 cursos, incluidos los 7 que se
encuentran al aire en estos momentos, y suma más de 4 50
0 horas-clases de transmisión habitual, refirió a Granma
Rolando Samuel, jefe del grupo de programas audiovisuales de la
vicepresidencia de la Televisión Cubana.
Hasta hoy, añadió, se garantiza la presencia sistemática de
programas que aborden como líneas temáticas esenciales el lenguaje,
las ciencias básicas, los conocimientos básicos y el ajedrez.
Adelantó al respecto que se preparan nuevos cursos sobre la
estructura de la población cubana, desde una perspectiva
demográfica; y sobre temas vinculados a la música, la biotecnología,
la historia de la filosofía, las enfermedades de transmisión sexual,
el idioma alemán, sobre el manejo costero y la actualización de
temas de la economía mundial, entre otros.
Asimismo, llamó la atención sobre la producción y distribución de
más de 29 millones de tabloides en papel gaceta, que funcionan como
contraparte digital de las video-conferencias, para sintetizar los
contenidos impartidos en las clases e incitar a la búsqueda y
profundización de los diferentes aspectos tratados.
A pesar de las dificultades técnicas actuales, el amor con que
trabajan especialistas y realizadores asegura la permanencia de este
espacio que, sin dudas, debe mucho a la consagración voluntaria de
un claustro de cerca de 1 800 profesionales relevantes de todas las
disciplinas y sectores de la vida social de nuestro país.
DAR LO MEJOR DE SÍ
Según Gladys Hernández, jefa del Departamento de Finanzas
Internacionales del Centro de Investigaciones de la Economía Mundial
y coordinadora de los programas sobre esta materia, la realización
de los cursos entraña una gran responsabilidad social y un alto
nivel de profesionalidad, pues demanda el diseño de clases
prácticas, amenas, interactivas y asequibles a toda la población,
sin perder calidad ni valor estético.
Destacados investigadores, como Reinaldo Sánchez, profesor de la
Facultad de Historia y Filosofía de la Universidad de La Habana y
coordinador del curso ¿Qué pasó en el Medio Oriente? Historia de
un mundo, resaltan la posibilidad que ofrece Universidad para
Todos de tratar temas complejos con mayor amplitud, apoyados en el
empleo de múltiples recursos audiovisuales y culturales.
Miguel Prendes, investigador del Centro de Protección e Higiene
de las Radiaciones y uno de los coordinadores del curso de
Tecnología nuclear al servicio de la vida, al aire en estos
momentos, comentó que 55 minutos en pantalla representan 24 horas de
edición, con el objetivo de que el resultado tenga la mayor calidad
posible. Sin embargo, el esfuerzo bien vale la pena, precisó, aquí
nos sentimos más útiles y tenemos la experiencia única de reflejar
lo anecdótico de la ciencia.
Desde el punto de vista de la realización audiovisual,
Universidad para Todos significa trabajar arduamente con personas
que muchas veces deben aprender a desarrollarse frente a las
cámaras, apunta Marta Julia Pérez, directora de programas y
coordinadora principal del proyecto por la Televisión Cubana. Para
nosotros ha sido también un aprendizaje, agregó, porque tenemos el
compromiso de lograr que nuestras transmisiones mantengan en el
futuro el rigor de estos 11 años. |