Dos ganadores del Premio Nobel de la Paz reclamaron
hoy el retiro de los militares de la ONU de Haití por atentar contra
la soberanía y dignidad de ese pueblo y propiciar un proceso de
recolonización económica.
La demanda fue dirigida al secretario general de
Naciones Unidas, Ban Ki-moon, por el argentino Adolfo Pérez Esquivel
y la irlandesa Betty Williams, galardonados con el Nobel en 1980 y
1976, respectivamente.
La misiva también está firmada por cientos de
organizaciones y personalidades de todo el mundo, entre estas
últimas el escritor uruguayo Eduardo Galeano y los teólogos
brasileños Leonardo Boff y Frei Betto.
El texto solicita la retirada de los cascos azules
de la llamada Misión de Estabilización de la ONU en Haití (Minustah),
porque ese Estado antillano no puede ser considerado una amenaza
para la paz y la seguridad internacionales.
Apunta que la presencia de esa fuerza no ha mejorado
la vida del pueblo haitiano, sino que, al contrario, atenta contra
la soberanía y dignidad de ese pueblo y asegura un proceso de
recolonización económica.
La carta considera que esa labor está dirigida por
un virtual gobierno paralelo (la Comisión Interina de Reconstrucción
de Haití), cuyos planes responden más a los prestamistas y
empresarios que a los derechos de las y los haitianos, advirtió
Prensa Latina.
Más adelante, sostiene que los problemas de Haití no
se solucionan con medidas coyunturales y asistenciales que agudizan
la dependencia.
Ese país necesita cambios donde el pueblo sea el
protagonista de su propia vida y constructor de su propia historia y
la presencia médica cubana (en Haití) es una muestra fehaciente de
que otra cooperación es posible, precisa.
Williams, Pérez Esquivel y el resto de los firmantes
destacan el fracaso de los objetivos trazados para la Minustah desde
su creación en 2004 y denuncian la continua violación a los derechos
humanos de la población por parte de militares que la integran.
Asimismo, piden al Consejo de Seguridad que no
renueve el mandato de la misión en su reunión del próximo 15 de
octubre y advierten contra cualquier intervención militar o policial
por parte de tropas extranjeras, especialmente de Estados Unidos.
Igualmente, consideran que resulta fundamental
respetar el derecho a la soberanía y la autodeterminación de Haití,
quitándole de encima las ocupaciones y las deudas espurias.
La misiva también está dirigida a los gobiernos de
los países que integran la Minustah, al Consejo de Seguridad de la
ONU y al secretario general de la Organización de Estados
Americanos, José Miguel Insulza.