LONDRES, 4 septiembre.— Unos 60 miembros de la ultranacionalista
Liga Inglesa de Defensa (EDL) resultaron detenidos tras una marcha
en esta capital que originó violentos enfrentamientos con agentes
antimotines, corroboró hoy la policía de Scotland Yard.
Los manifestantes lanzaron botellas, objetos y petardos contra
los agentes del orden, cuya presencia se reforzó el sábado en el
sector este de la ciudad para controlar la situación y evitar
sucesos violentos, como los ocurridos en Londres en julio pasado.
La EDL (por sus siglas en inglés) había solicitado a la Policía
Metropolitana (Scotland Yard) autorización para realizar una
manifestación estática sin un recorrido previo ante la prohibición
dispuesta por la ministra de Interior, Theresa May, de marchas en
varias áreas de Londres y localidades cercanas.
Según la prensa, los choques estallaron luego del discurso del
líder de la organización neonazi, Stephen Lennon, en libertad
condicional tras ser condenado a prisión en agosto de 2010 por
encabezar una riña con fanáticos de fútbol.
Cerca del lugar, a unos pasos de la mezquita de East London, unos
mil 500 activistas de la organización pacifista Unidos Contra el
Fascismo protestaron contra la presencia en las calles de elementos
neonazis, confirmaron también fuentes de Scotland Yard.
Con cantos de No pasarán y otros lemas por la paz, los
manifestantes antifascistas respondieron a las provocaciones de la
marcha de extrema derecha, celebrada el sábado, bajo la vigilancia
de unos tres mil agentes de la policía montada y la canina.
El reverendo Alan Green, uno de los organizadores de la coalición
antifascista, dijo que la mayoría de la población está muy contenta
de convivir en la diversidad y tenemos que demostrar el grado de
oposición a la EDL y a su retórica, subrayó el activista.
Asociaciones de inmigrantes musulmanes acusan al EDL de fomentar
el odio contra las comunidades islámicas a través del discurso de la
supuesta islamización de Reino Unido, señala el periódico The
Independent.
El diario The Guardian, por su parte, califica de polémica la
decisión de la Liga Inglesa de llevar a cabo la marcha, a pesar de
las tensiones reinantes por los disturbios en Londres y los
atentados terroristas en Noruega por el xenófobo y antimusulmán
Anders Breivik.
El terrorista confeso aseguró que tenía unos 600 seguidores de la
EDL como amigos en la red social Facebook, recuerda el rotativo
británico.