Una decena de personas que celebraban este miércoles el fin del
mes sagrado del Ramadán perdieron la vida debido a la explosión de
un coche bomba conducida por un atacante suicida en la suroccidental
ciudad paquistaní de Quetta.
El atentado tuvo lugar en una zona de aparcamiento de la
carretera de Gulistan, que conduce a la capital de la convulsa
provincia de Baluchistán, dijo a la televisora Geo News Abdullah
Afridi, un oficial de la policía local, reporta Prensa Latina.
Según testigos presenciales, de 10 a 14 vehículos se incendiaron
tras el estallido de la bomba, mientras los cristales de decenas de
negocios cercanos volaron en pedazos.
El conductor intentó adentrarse más en la multitud para causar el
máximo daño posible, pero las estrictas medidas de seguridad en el
lugar se lo impidieron, explicó Afridi.
Entre las víctimas se cuentan tres mujeres, mientras el número de
heridos sobrepasa la veintena.