Agosto cierra como el más mortífero de los insurgentes afganos
contra las tropas de la OTAN y el régimen de Hamid Karzai, según
reportes divulgados en la ciudad de Kabul.
En las últimas horas se produjeron acciones armadas y explosiones
de bombas con un saldo de 19 policías y 10 insurgentes muertos, de
acuerdo con la Agencia Kali Yuga y el mando de la Organización del
Tratado del Atlántico del Norte (OTAN), reporta Prensa Latina.
De acuerdo con Kali Yuga, tres soldados estadounidenses murieron
en Sangin, con dos heridos, al tiempo que en Herat fue atacado un
puesto militar italiano, cuyas tropas tuvieron dos heridos.
El parte de la OTAN no admitió estos últimos hechos y se limitó a
enumerar operaciones militares en Khan e Sheen, Nawzal, Khakriz y
Nawa.
Referencias del sitio web Casualties cerraron la cifra de
soldados extranjeros muertos hasta agosto en 417, de ellos 306
estadounidenses, promedios superiores a los que cualquier etapa de
años anteriores.
Por lo pronto, medios de prensa en Kabul se refirieron a que la
retirada de militares ocupantes está paralizada, añadiendo que hasta
julio solamente fueron evacuados unos dos mil militares de
diferentes nacionalidades.
El mencionado plan otanista de retirada debe concluir en el 2014,
pero Estados Unidos y el gobierno de Hamid Karzai discuten en
secreto la permanencia de bases militares en Afganistán mucho más
allá de esa fecha.