El tifón Nanmadol, con vientos de más de 120 kilómetros por hora,
amenaza el norte de Filipinas, lo que provocó de inmediato la alerta
máxima en todo el territorio.
Las autoridades decretaron la rápida evacuación de las zonas
costeras ante la inminente posibilidad de ríadas, avalanchas e
inundaciones, debido a las fuertes llluvias que acompañan al
fenómeno, reporta Prensa Latina.
Filipinas es habitualmente azotada por huracanes de media y gran
intensidad, los cuales han provocado graves daños a una
infraestructura débilmente concebida y presionada por el alto número
de habitantes, entre otros factores.