El ministro británico de Defensa, Liam Fox, confirmó hoy que la
OTAN apoya a los rebeldes y contribuye con inteligencia y equipos de
reconocimiento en la persecución del líder libio Muammar el Gadafi.
Fox declaró a la televisora Sky News que la Organización del
Tratado del Atlántico Norte (OTAN) proporciona recursos al llamado
Consejo Nacional de Transición libio (CNT) para ayudarles a dar con
el paradero de El Gadafi.
No obstante, el ministro negó que fuerzas de élite del ejército
británico, las SAS (Servicio Especial Aéreo), estuvieran en suelo
libio incluidas en las agresiones de los rebeldes contra fuerzas
leales al Gobierno.
El diario londinense The Guardian, denunció la víspera que esos
militares se unieron a fuerzas especiales y han actuado como
controladores aéreos y como asesores en las tácticas de combate de
los opositores en la nación norafricana.
Agentes británicos ya estaban en Libia desde febrero pasado,
antes del mandato de la ONU para crear una zona de exclusión aérea
sobre el Estado magrebí bajo el pretexto de proteger a la población
civil, afirmó el rotativo.
Por otra parte, la portavoz de la OTAN, Oana Lungescu, declaró
que el CNT pidió a las autoridades militares de la Alianza apoyar a
los rebeldes como parte del respaldo internacional.
También señaló que el órgano de dirección política del grupo de
los Veintiocho solicitó a la estructura castrense del bloque
examinar formas de asistir a una posible misión de estabilidad en
Libia, bajo el mandato de la ONU.
Desde que la OTAN tomó el mando de las operaciones militares en
Libia, a fines de marzo último, realizó cerca de 20 mil incursiones
aéreas, incluyendo siete mil 500 bombardeos contra fuerzas del
Gobierno.
De acuerdo con los más recientes reportes de fuentes oficiales de
Trípolis, en la última semana los bombardeos de los aliados contra
Libia dejaron alrededor de dos mil muertos y mil 800 heridos, señaló
Prensa Latina.