SANTIAGO DE CHILE, 24 de agosto.— Chile vivió hoy una tensa jornada de paro nacional, convocado por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) y al que se sumaron diversas organizaciones políticas y sociales que retaron con sus protestas al Gobierno.

La movilización representa un gran desafío de las fuerzas sociales al Gobierno del presidente Sebastián Piñera, para exigir cambios al sistema laboral y educacional, el fin al lucro en la enseñanza e incluso una nueva reforma a la Constitución.

La protesta, que se extenderá hasta mañana jueves, comenzó temprano en la mañana con bloqueos de calles por grupos de encapuchados en diferentes zonas populares de Santiago, que derivaron en enfrentamientos con carabineros, según Notimex.

La Asociación Nacional de Empleados Fiscales cifró en 80 % la adhesión a la movilización, lo que derivó en que casi la totalidad de los servicios públicos se paralizaran durante el día, indicó ANSA.

Esta jornada fue calificada como un éxito por la CUT, cuyo titular, Arturo Martínez, descartó que la situación en el país sea de normalidad, como lo dio a entender el Gobierno.

Mientras tanto, seis estudiantes chilenos que permanecían en huelga de hambre desde hace 37 días en una localidad en la periferia de esta capital depusieron el ayuno este miércoles.

Gloria Negrete, vocera del grupo, dijo que adoptaron la medida debido al precario estado de salud en que se encontraban y porque "nuestros compañeros nos necesitan más afuera que acá".