Cuatro victorias y dos reveses, uno de ellos ante la francesa
Gevrise Emane, a la postre campeona, fue el balance de la actuación
de la cubana Mariset Espinosa en los 63 kilos del mundial de judo.
Siempre buscamos la medalla, nos desilusiona un poco aunque
valoramos la entrega de esta muchacha y sus perspectivas, comentaron
a Prensa Latina los entrenadores Ronaldo Veitía y Armando Padrón.
Espinosa salió airosa de un difícil sorteo con tres asiáticas en
fila. Se impuso a la japonesa Kana Abe y a la china Lili Xu por waza-ari
y a la surcoreana Ja Young Kong por dos yuko.
Contra la local Emane, número dos del ranking internacional, se
requirió de Regla de Oro (tiempo extra), para caer por ippon. La
francesa conquistó la corona del orbe al destronar a la japonesa
Yoshie Ueno, titular de Tokio-2010.
Ya en la disputa hacia la medalla de bronce, la jovencita cubana
doblegó por ippon a la austriaca Hilde Drexler, pero perdió frente a
la eslovena Urska Zolnir, cuarta en el ranking del orbe.
En la liza masculina, Osmay Cruz (Cuba) logró rebasar su primera
pelea por puntos frente al uzbeco Farmon Kabulov. Después cedió en
Regla de Oro ante el belga Joachim Bottieau, en un cotejo muy
reñido.