Fuertes marejadas asociadas al huracán Irene salpican este lunes
la costa suroeste de República Dominicana, donde se registran las
primeras inundaciones costeras y cortes de electricidad debidos a la
creciente intensidad de los vientos.
Aunque el ciclón, primero de la actual temporada, se encuentra a
unos 200 kilómetros al este-noreste de Punta Cana, en el extremo
oriental, las precipitaciones y ráfagas comenzaron a azotar el país
desde horas de la madrugada de este lunes, reporta Prensa Latina.
La Oficina Nacional de Meteorología estableció el estado de
alerta en todo el perímetro costero, ante la posibilidad de
penetraciones del mar y deslaves.
Esa institución llamó a la población a mantenerse atenta, pues
las lluvias pueden originar deslizamientos de tierra e inundaciones
repentinas o graduales en esa zona.
Irene tenía en la mañana de hoy vientos máximos sostenidos de 120
kilómetros por hora (kph), se movía hacia el oeste-noroeste a unos
22 kph y está previsto que aumente su intensidad próximamente,
declaró a Prensa Latina el meteorólogo Javier Serrano.
La amenaza de huracán sobre Dominicana se repite a 17 días del
paso de la tormenta Emily, que dejó cinco muertos y casi siete mil
evacuados.
En la vecina Haití, el temor aumentó entre la población,
principalmente entre los más de 580 mil damnificados del terremoto
de enero de 2010, que viven aún en carpas.
Irene, convertido en huracán esta madrugada, fue la novena
tormenta tropical que se formó desde el inicio de la temporada
ciclónica en el Atlántico el pasado 1 de junio. Las anteriores se
llamaron Arlene, Bret, Cindy, Don, Emily, Franklin, Gert y Harvey.