CARACAS, 19 agosto.— El Gobierno de Venezuela rechazó hoy de
manera categórica acusaciones de Estados Unidos contenidas en su
informe anual sobre el terrorismo, por considerarlas un nuevo
capítulo de sus agresiones y políticas injerencistas.
A través de un comunicado del Ministerio de Relaciones
Exteriores, Caracas señaló que el texto está plagado de falsas
afirmaciones y amenazas, en sintonía con la tradicional postura de
Washington contra países soberanos.
Estados Unidos ratifica su línea permanente de agresión a los
gobiernos independientes y soberanos como el venezolano, con la
intención de imponer, mediante la intimidación, su política
internacional de atropello y dominación, advirtió en la nota
circulada aquí.
Venezuela consideró además que el país norteño carece de
autoridad moral para acusar a otras naciones en la materia, al dar
refugio y protección al terrorista Luis Posada Carriles, responsable
del sabotaje de octubre de 1976 contra un avión cubano, en el cual
perdieron la vida 73 personas.
También están sus prácticas ilegales, como las operaciones
encubiertas fuera de su territorio o las masacres de civiles en sus
numerosos frentes de guerra, agregó a propósito del informe en el
que Washington acusa a Caracas de falta de cooperación en el combate
al flagelo.
Mediante el comunicado, la Cancillería reiteró el compromiso de
Venezuela con la paz y el respeto a la autodeterminación de los
pueblos.