El activista social indio Anna Hazare aseguró hoy que se
mantendrá en huelga de hambre en una plaza de esta capital hasta que
el gobierno apruebe una fuerte ley contra la corrupción, dio a
conocer Prensa Latina.
Tras abandonar la celda donde estuvo recluido desde la mañana del
martes, Hazare llegó al céntrico Ramlila Ground, donde bajo una
intensa lluvia lo esperaban miles de ciudadanos que apoyan su ayuno
por tiempo indefinido en demanda de un Lokpal (oficina
anticorrupción) autónoma y de vasto alcance.
No vamos a retirarnos de este lugar hasta que el gobierno apruebe
una fuerte ley contra la corrupción, dijo en medio de una cascada de
confetis, aplausos y consignas en respaldo a su batallar por el
saneamiento de la administración pública y de las instituciones
estatales.
Considerado un seguidor de las doctrinas de Mohandas Gandhi, el
luchador social de 74 años hizo un especial llamamiento a los miles
de niños y jóvenes que, con uniformes escolares y la bandera india
pintada en los rostros, abarrotaban el Ramlila Ground.
El poder de la juventud es el poder de la nación, esté aquí o no
Anna Hazare. Ustedes son los responsables de que la antorcha de la
revolución permanezca siempre encendida, dijo.
En varias ocasiones Hazare ha calificado a la cruzada contra la
corrupción como una batalla por la segunda independencia.
Nuestra sociedad no va a avanzar hasta que arremetamos todos
juntos con la inmoralidad, los fraudes y las estafas que hacen cada
vez más ricos a los ricos, y más pobres a los pobres, dijo a Prensa
Latina Kumar Chopra, un estudiante de Comunicación de la Universidad
Jawaharlal Nehru.
Según analistas y representantes de la sociedad civil, la
corrupción imperante en las altas esferas del gobierno es el
principal impedimento de la India hacia la meta de convertirse en
una de las primeras potencias económicas mundiales.
Somos una tierra con muchos recursos, pero más de la tercera
parte de los mil 210 millones de nuestros compatriotas viven por
debajo del umbral de la pobreza y alrededor del 40 por ciento no
sabe leer ni escribir. Eso, y otros males como la corrupción, tienen
frenado a nuestro país, dijo el economista R. K. Singh.
Hace unos días, acosada por los partidos de oposición y
movimientos como el de Hazare, la gobernante Alianza Progresista
Unida llevó al Parlamento un proyecto de ley anticorrupción que se
ganó el rechazo popular por no alcanzar a la cúpula gubernamental, a
los legisladores ni a los altos magistrados.
La decisión de Hazare de declararse en huelga de hambre por ese
motivo, y su encarcelamiento el martes, generaron una ola espontánea
de manifestaciones a lo largo y ancho de toda la India, hasta el
punto que una pocas horas después de su detención, los focos de
protesta se calcularon en un millón.