Tras cuatro horas de reunión la Liga Profesional de Fútbol (LPF)
y la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) fueron incapaces de
desconvocar la huelga de jugadores que aplaza la apertura del
campeonato nacional, informó Prensa Latina.
Los principales directivos de ambas entidades, Luis Rubiales, del
gremio de jugadores, y José Luis Astiazarán, de la empresa
deportiva, defendieron las posiciones de sus respectivas
instituciones en un segundo intento en la semana por llegar a un
acuerdo que facilitara el arranque de la Liga, previsto para este
fin de semana.
Al término del encuentro en la sede de la LPF comparecieron ante
la prensa Astiazarán y Luis Gil, gerente de la AFE, para anunciar la
ausencia de acuerdo entre las partes, al tiempo que reconocían la
existencia de propuestas para la futura solución del conflicto
laboral.
Las fundamentales discrepancias entre los dos entes radican en el
actual convenio colectivo, el cual según el sindicato no aporta
suficientes garantías de cobro para los jugadores.
El gremio exige la formulación de un nuevo contrato en el que
prime la Ley del Deporte por encima de la Ley Concursal, legislación
mercantil a la cual pueden acogerse actualmente los clubes y que
permite no hacer frente a las deudas acumuladas y congela el pago de
las nóminas de los jugadores.
Ambas partes confirmaron que mañana sábado volverán a encontrarse
en la sesión matutina en lo que calificaron como reunión de trabajo
y que no comparecerán ante los medios hasta una tercera cita, fijada
para el lunes 22 en la mañana.