MÉXICO, 2 agosto.— El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos,
reiteró hoy que su país y México deben seguir combatiendo con toda
vehemencia y contundencia el narcotráfico.
Para nosotros "es un problema de seguridad nacional, así de
sencillo", manifestó el mandatario durante un encuentro con la mesa
directiva del Senado mexicano, encabezada por Manlio Fabio Beltrones.
Explicó que en Colombia se lograron importantes éxitos en esta
lucha, aunque admitió que el narcotráfico florece a nivel mundial
debido a los incentivos perversos que llevan a que más personas se
involucren en actividades delictivas.
"Ese negocio sigue porque el mundo no ha sido capaz de
encontrarle una solución a este problema", puntualizó Santos.
Mientras más éxitos se logran en un país, el narcotráfico florece
en otros, y mientras más decomisos de drogas se alcanzan, más se
elevan los precios internacionales de los estupefacientes, lo que
atrae a más personas a delinquir, opinó el mandatario.
El jefe de Estado también señaló que Colombia ofreció su respaldo
a los países centroamericanos y a las islas del Caribe para
enfrentar al crimen organizado, el cual es un problema creciente.
En este encuentro, el mandatario colombiano también destacó la
importancia de impulsar el mecanismo de integración profunda Alianza
del Pacífico que suscribieron en abril pasado los presidentes de
México, Chile, Colombia y Perú.
"Durante muchos años hemos sido el continente del futuro, pero
nunca se ha hecho realidad, y esta década puede ser la de América
Latina, pues tenemos todo lo que el mundo está pidiendo: energía,
biodiversidad, la capacidad de aumentar la producción de alimentos,
agua, población joven", explicó.
En la mañana el presidente colombiano sostuvo una reunión con el
titular de la Suprema Corte de Justicia, Juan Silva Meza, para
tratar sobre el funcionamiento de los Poderes Judiciales de ambas
naciones, así como de las reformas en el sector.
Después recibió las llaves de Ciudad de México y fue reconocido
como Huésped Distinguido por el alcalde capitalino, Marcelo Ebrard,
en una ceremonia celebrada en el antiguo Palacio de Gobierno.
A la salida de ese encuentro, en el Antiguo Palacio del
Ayuntamiento, varios manifestantes protestaron por la visita de
Santos al país.
Junto al expresidente Álvaro Uribe, le reclamaron por la muerte
de tres mexicanos, tras un bombardeo ilegal realizado por las
fuerzas armadas colombianas en territorio de Ecuador el 1 de marzo
de 2008, y de la persecución de Lucía Morret, la única sobreviviente
mexicana de ese operativo militar.
En ese entonces Santos era el ministro de Defensa del gobierno de
Uribe.
El gobernante colombiano también sostuvo una comida de trabajo
con el Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales, con la cual puso
fin a su visita oficial por invitación de su homólogo Felipe
Calderón. (PL)