TÚNEZ, 20 junio.— Un tribunal de primera instancia condenó hoy,
en rebeldía, a 35 años de cárcel al expresidente de Túnez Zine El
Abidine Ben Alí y su esposa, Leila Trabelsi, por malversación de
fondos públicos y otros delitos.
Tras un día de maratónico proceso judicial en esta capital, la
referida corte halló a Ben Alí y a su mujer, ambos radicados en
Arabia Saudita desde que huyeron del país el 14 de enero, culpables
de robo y posesión ilegal de dinero y joyas, informó la televisión.
El principal canal estatal indicó que la otrora pareja
presidencial fue sentenciada a pagar una multa total de 65,6
millones de dólares, pese a que el juicio contra ambos por posesión,
tráfico y consumo de estupefacientes y armas fue postergado para
dentro de 10 días.
Según el juez, el depuesto presidente tunecino dejó abandonado en
sus palacios en su huída a la ciudad saudita de Jeddah cuantiosas
sumas de dinero y joyas valoradas en miles de dólares, presuntamente
obtenidas mediante desfalcos al erario.
La Fiscalía General pidió la pena máxima prevista en el Código
Penal de Túnez para Ben Alí y Trabelsi al imputarles el cargo de
traición a la patria, mientras el equipo de abogados defensores
solicitó sin éxito un aplazamiento del proceso judicial.
Sobre el exgobernante pesan más de 90 delitos, por muchos de los
cuales responderá conjuntamente con antiguos colaboradores y
familiares acusados, y algunos sesionarán en juzgados de las
provincias de Sidi Bouzid, donde estalló el movimiento de protestas
que lo derrocó.
También se prevé realizar vistas en Sousse, Monastir, La Manouba,
Gabes, Arianna y Gafsa, y 35 se tramitarán en cortes militares por
presunto homicidio voluntario, complot contra la seguridad del
Estado y abuso de poder.