El Movimiento de Países No Alineados (MNOAL) emitió este viernes
una enérgica condena al terrorismo en todas sus formas y
manifestaciones, según señala la Declaración Final de su XVI
Conferencia Ministerial, clausurada en Bali, Indonesia.
El documento se contrapone además a todos los actos, métodos y
prácticas aplicados con ese fin, dondequiera que se cometan,
quienquiera que los perpetre y contra quienquiera que fuesen,
reporta Prensa Latina.
El texto, un importante ingrediente del documento aprobado este
mediodía por los ministros, aboga porque se adopten medidas rápidas
y eficaces para eliminar el terrorismo internacional.
Instan a todos los Estados, de conformidad con la Carta de las
Naciones Unidas, a cumplir las obligaciones contraídas en la lucha
contra el terrorismo, en virtud del derecho internacional y el
derecho humanitario internacional, y lo combatan enjuiciando o,
cuando proceda, extraditando a los autores de actos terroristas.
La declaración reclama que se impida a los autores de estas
acciones organizarse, instigar o financiar operaciones contra otros
Estados desde dentro o fuera de sus territorios o mediante
organizaciones asentadas dentro de sus límites geográficos.
Los países no alineados, que en esta cita de Bali incrementaron
su membresía a 120 con la incorporación de Fiji y Azerbaiyán,
también consideraron que el terrorismo no deberá equipararse con la
lucha legítima de los pueblos que se encuentren bajo dominación
colonial o foránea y ocupación extranjera, por la libre
determinación y la liberación nacional.
Se deberá seguir denunciando el trato brutal a las personas que
permanecen bajo ocupación extranjera por ser la forma más grave de
terrorismo, y se deberá seguir condenando el uso del poder del
Estado para someter a la represión y a la violencia a personas que
luchan contra la ocupación extranjera en ejercicio de su derecho
inalienable a la libre determinación, precisa el texto.
La cita ministerial del MNOAL se desarrolló desde el lunes en
esta isla, que el 12 de octubre de 2002 fue blanco del mayor
atentado terrorista de su historia, cuando tres bombas estallaron en
el distrito turístico de Kuta.
A causa de las explosiones murieron 202 personas, de ellas 164
extranjeros y 38 indonesios. La cifra de heridos ascendió a 209.
Miembros de la organización Jemaah Islamiya fueron sentenciados
en relación a los atentados, incluyendo a tres individuos condenados
a la pena de muerte. Abu Bakar Bashir, el supuesto líder espiritual
de Jemaah Islamiyah, fue hallado culpable y sentenciado a dos años y
medio de cárcel.