Manuel Díaz Riverol, subdelegado de Inversiones de Recursos
Hidráulico en Sancti Spíritus, explicó a Granma que las
labores que se acometen en estos momentos en los embalses —Dignorah,
Lebrije y La Felicidad—, tendrán una incidencia directa en programas
agrícolas priorizados que hoy se impulsan tanto en esta provincia
como en la vecina Ciego de Ávila, en particular los cultivos de
arroz y soya.
En el caso específico de la Dignorah, una presa de 31,8 millones
de metros cúbicos de capacidad, ubicada en el cauce del río
Zurrapandilla, fuerzas del MICONS acometen la reconstrucción
integral del aliviadero, cuyo estado técnico mantiene la obra
inutilizada desde hace varios años.
Los trabajos, valorados en algo más de medio millón de pesos,
comprenden la fundición de 22 pilotes de hormigón, la losa y los
muros, todo lo cual, según el cronograma, debe quedar concluido a
mediados de este año con vistas a aprovechar las aguas de la actual
temporada de primavera.
En relación con Lebrije, durante el 2010 se concluyeron los
cuatro pozos de alivio proyectados en el talud exterior y se mejoró
el camino que conduce hasta el acuatorio por la zona de El Meso;
ahora se trabaja en el puente sobre el aliviadero viejo, que
facilitará el acceso a la cortina.
Para el venidero año se ha previsto concluir el segundo
aliviadero, todo lo cual permitirá la retención segura en esta obra
de 82,3 millones de metros cúbicos, el equivalente a su volumen de
aguas normales.
En La Felicidad, un embalse con 42 millones de metros cúbicos de
capacidad, la Empresa de Proyectos Hidráulicos de Pinar del Río
labora en la búsqueda de una solución definitiva para su aliviadero
de compuertas, cuyo estado de deterioro la mantiene en prevención
hidrológica desde hace más de una década.