Científicos en Suiza crearon un material que -según afirman- se
autorrepara y podría resultar muy útil en pinturas para automóviles,
entre otras aplicaciones.
Imagine usted un trozo de plástico cualquiera que recibe un corte
o una rayadura. Lo que tenemos ante nuestros ojos es, en realidad,
una pequeña grieta que atraviesa varias capas del material, reporta
CubaDebate.
La forma común y corriente de reparar el plástico dañado es
llenando la grieta con material adicional. Pero imagine ahora la
posibilidad de reparar el daño mediante la simple aplicación de luz
ultravioleta durante 30 segundos o un minuto.
Esto es lo que han conseguido en los laboratorios del Instituto
Adolphe Merkle, de la Universidad de Friburgo: desarrollaron un
polímero (compuesto químico, natural o sintético, que consiste
esencialmente en unidades estructurales repetidas) de consistencia
gomosa que contienen compuestos metálicos capaces de absorber los
rayos ultravioleta y convertirlos en el calor necesario para
efectuar una autorreparación.
En el proyecto participan también la Universidad Case Western
Reserve en Cleveland, Ohio (Estados Unidos), y el Laboratorio de
Investigaciones del Ejército en Aberdeen, Escocia (Reino Unido), que
pertenece al Ministerio de Defensa británico.
"Este tipo de materiales capaces de repararse a sí mismos ya
existían", le dijo a BBC Mundo Marc Pauchard, subdirector del
Instituto Adolphe Merkle. "Su efectividad se basa en que llevan
incorporado el compuesto reparador y lo único que necesitan para
activarse es calor o luz". Pero la desventaja de este tipo de
polímeros es que sólo pueden utilizarse una sola vez, en un proceso
irreversible.
Sin embargo, el material creado por los investigadores suizos
supera esta desventaja. Pauchard explicó: "El compuesto tiene
eslabones de cadenas más cortos que los polímeros convencionales y
puede ser activado y desactivado según se necesite, mediante la
aplicación de luz ultravioleta".
"Es este diseño molecular el que permite que los materiales
alteren sus propiedades en respuesta a una alta dosis de rayos",
añadió el profesor de Química de Polímeros y Materiales.
Pauchard le dijo a BBC Mundo que los científicos del Instituto
Adolph Merkle son reacios a especular sobre las posibles
aplicaciones comerciales del polímero creado en Suiza.
Sin embargo, admitió que no le era difícil imaginar un área
específica: "Un ejemplo imaginable es lo que tiene que ver con la
pintura de los automóviles".
"Podría haber interés entre los dueños de vehículos en reparar
las rayaduras mediante la aplicación de luz ultravioleta. El
procedimiento podría demorar 30 segundos o un minuto".
También todo lo que posea cristales, pantallas y visores podría
beneficiarse de este material, al igual que el barniz para pisos y
muebles.
Si bien -según los investigadores- las pruebas confirmaron que el
polímero funciona, por el momento el nuevo material no está
disponible comercialmente. Más análisis son necesarios para llevarlo
del laboratorio a la calle.