El Gobierno paquistaní protesta desde hace tiempo contra
Washington, que sin embargo no desiste de estos ataques de sus
aviones sin piloto Predator, presuntas máquinas de "precisión", que
dan en el blanco buscado.
La ráfaga de misiles lanzada al alba desde dos aviones
teleguiados dio contra un edificio de un supuesto comandante talibán
en la zona de Spinwam, pero en realidad allí había decenas de
personas, incluyendo civiles.
Durante la jornada fueron extraídos 25 cuerpos bajo los
escombros, entre ellos los de tres mujeres y cinco niños.
El 17 de marzo, también en Waziristán del Norte, los misiles
fueron contra un edificio donde se realizaba una asamblea pacífica
entre jefes tribales. En esa oportunidad murieron 40 personas y hubo
protestas de las máximas autoridades de Islamabad.